"¿Qué pasa? ¿Había una convocatoria para hoy? ¿Algo se "cocina" por allá arriba y aún no lo han anunciado?", se preguntó este jueves la periodista cubana Yoani Sánchez tras comprobar que varios de sus colegas, al igual que ella, no podrán salir de sus viviendas.
La directora del diario digital 14ymedio denunció en Twitter que varios activistas y periodistas independientes, como la reportera Luz Escobar, tienen operativos policiales alrededor de sus casas y les impiden salir a la calle.
"Ni mi esposo, el periodista Reinaldo Escobar, ni esta servidora podemos poner un pie fuera de esta mole de concreto "hasta nuevo aviso", advierte policía político vestido de civil", agregó Sánchez.
"El operativo en los bajos de nuestro edificio está compuesto, hasta donde pudimos ver, por un miembro de la Seguridad del Estado vestido de civil (que mostró su carné tras mucha insistencia) y dos mujeres vestidas de policía (imagino que destinadas a esta servidora). El policía político amenazó con procesar al periodista Reinaldo Escobar por el delito de "desacato" cuando él preguntó en varias ocasiones el motivo de esta violación de nuestro derecho a la libertad de movimiento", denunció Sánchez.
La periodista Luz Escobar subió a las redes el audio en que un agente de seguridad del Estado le dice que no puede salir.
Escobar declaró a Radio Televisión Martí que por el nerviosismo que notó en los oficiales tiene la impresión de que algo grave ha pasado.
La reportera afirmó que otros colegas como Monica Baró y Ariel Maceo de ADNCuba también están sitiados al igual que activistas del Movimiento San Isidro.
La periodista de CiberCuba Iliana Hernández también publicó en redes imágenes del agente que la vigila y le impide salir de su domicilio.
Ariel Maceo comentó en Twitter que en su caso los agentes le mencionaron una convocatoria de la que no tenía conocimiento.
En el caso de Mónica Baró, el operativo incluyó cuatro agentes, según describe en su post en Facebook: "Intenté salir ahora de mi casa y dos mujeres oficiales del Ministerio del Interior y un hombre vestido de civil me abordaron cuando no había avanzado ni veinte metros de la entrada de mi edificio para informarme que no podía salir “por el aislamiento”. Les pregunté cómo era posible que yo no pudiera salir de mi casa a hacer compras cuando la calle estaba llena de gente, cuando el parque cercano estaba lleno de gente, y se limitaron a responder que yo no podía salir “por el aislamiento”. Les pedí que no subestimaran mi inteligencia, que estábamos viendo los tres la cantidad de personas que había en la calle, que era obvio que había otras razones para impedirme salir de mi casa, y que prefería que me dijeran que no podían darme esa información y nada más. Me preguntaron si era muy urgente lo que me hacía salir, si no podía esperar a más tarde, si era de vida o muerte, y les expliqué que si estaba saliendo de mi casa era porque lo necesitaba. En realidad, necesitaba verificar que las cuatro personas -los dos hombres de civil y las dos mujeres de verde olivo- que había visto frente a mi casa estaban ahí por mí. Estaban bajo la misma sombra que quienes me vigilaron el 30 de junio pasado".
Intenté salir ahora de mi casa y dos mujeres oficiales del Ministerio del Interior y un hombre vestido de civil me...
Posted by Mónica Baró Sánchez on Thursday, July 30, 2020