El Observatorio de Género Alas Tensas (OGAT) hizo un llamado a la ciudadanía para que denuncien los feminicidios en la isla, ya sean reciente o no.
"Nombrar los feminicidios es hacer justicia, el ejercicio más básico de reparación con todas las víctimas de violencias machistas", dijeron las feministas en una publicación en sus redes sociales.
"Recordemos que contabilizar la violencia machista nos ayuda a proponer políticas públicas que ayuden a su erradicación", agregan.
Este año los observatorios independientes han logrado verificar 28 feminicidios. La cifra indica que, como promedio, cada semana al menos una mujer es asesinada en Cuba por motivos de género.
En 2023 los registros alcanzaron un número récord: 89 víctimas mortales. “Es alarmante y estamos seguras que los casos que documentamos están por debajo del número real. Estamos frente a un sistema que no pone interés en cómo funciona la violencia de género y en cómo se expresa", dijo a Martí Noticias Yanelys Núñez, coordinadora general del OGAT, durante una entrevista en la que habló de las principales fallas del sistema para combatir este flagelo.
"La desprotección que sufren las mujeres no solo se ha quedado en el ámbito doméstico. En 2023 registramos crímenes machistas en estaciones de Policía y en centros laborales, muestra de la vulnerabilidad a la que se enfrentan las víctimas de violencia de género en todos los espacios de la sociedad”, explicó.
Aunque el oficialismo ha ido incluyendo esta problemática en su agenda pública, los feminicidios no son reconocidos por las autoridades y el término no está tipificado como delito en el Código Penal vigente.
A finales del pasado año la Federación de Mujeres Cubanas (FMC) hizo público que 117 mujeres habían sido asesinadas entre enero y octubre de 2023, un número incluso mayor que el que fue documentado por las organizaciones independientes.
“Nosotras no tenemos maneras de monitorear nada de lo que dicen porque ellos no hacen rendiciones de cuenta, ni existe transparencia en las cifras que exponen. Ese número fue dado por la presión que hemos ejercido en los últimos años para que se expongan las estadísticas de feminicidios en Cuba, pero no sabemos de dónde salió el dato, ni qué metodología utilizan para contabilizar esas muertes, ni siquiera sabemos quiénes son esas mujeres”, apuntó Núñez.