Ni Cuba ni fabricante de ron en Dominicana explican uso de imagen de Martí en envases

Las imágenes de Martí, a la izquierda en el sello emblemático del peso cubano, y a la derecha en el envase del Oliver’s Presidente Martí-El Gran Ron del Caribe.

La compañía de un empresario cubano que tuvo negocios en Miami y se radicó después en República Dominicana produce un ron llamado José Martí en envases que usan abiertamente la imagen del peso cubano, pero ni él ni las autoridades de la isla responden cuando se les pregunta qué relación hay, si alguna, entre ambos.

En una información fechada el 11 de enero de 1996, el diario El Nuevo Herald reportaba que ese empresario, Pedro Ramón López Oliver, “estuvo en Cuba varios meses el pasado año, apoyado por varios de sus amigos reformistas en el gobierno, para negociar con empresas estatales la fabricación conjunta de un ron que se distribuiría en el exterior”.

La misma fuente “relacionada con López y que pidió no ser identificada” le dijo al periódico entonces: “Fue el primer cubanoamericano que, abiertamente, intentó llevar adelante esa política que algunos reformistas respaldan, de abrirse a los cubanos en el exterior”.

Sin embargo, alguien que lo conoce, el escritor Carlos Alberto Montaner, asegura que ahora el régimen no le permite a López Oliver visitar la isla.

“Está furioso porque la última vez que pidió permiso para ir se lo negaron”, dijo Montaner a radiotelevisionmarti.com.

Ron Martí a la venta en el Aeropuerto Internacional de Santo Domingo, República Dominicana.

La imagen sobre estas líneas fue tomada recientemente en la tienda libre de impuestos del Aeropuerto Internacional de Santo Domingo, en República Dominicana. Muestra las botellas de Oliver’s Presidente Martí-El Gran Ron del Caribe a la venta con el retrato del prócer independentista.

Pero no es cualquier retrato de Martí. Ostensiblemente, reproduce el emblemático sello de la unidad básica de la moneda nacional cubana.

Una simple búsqueda en Google reveló la empresa productora, Oliver & Oliver, y de paso dimos con Chatham Imports, Inc., que tiene oficinas en la 5ta Avenida de Nueva York y comercializa otra marca, “Martí Auténtico”, cuya etiqueta también usa el Martí del peso cubano.

De acuerdo con un artículo aparecido en mayo del 2005 en el diario Sun Sentinel, fue Chatham Imports la que desarrolló ese ron “trabajando con productores de República Dominicana en una receta básica”, y dice que lo envasaba en Lewiston, Maine.

Hay otro ron Martí, aparentemente producido en Panamá, que no usa la imagen del peso cubano.

Hace hoy exactamente diez días que RadioTelevisionMarti.com pudo comunicarse con la sede de Oliver & Oliver en Santo Domingo, y alguien que se identificó como Edily Cuevas tomó el mensaje con la promesa de entregárselo a Pedro López Oliver. En el sitio de contactos profesionales Linkedin aparece una persona bajo el nombre de Edily Cuevas Urbano que se registra como Secretaria General de Oliver & Oliver International Inc. desde agosto de 2014.

No había pasado una hora cuando López Oliver llamó al reportero e inició una conversación ajena al tema. Al escuchar que el periodista se disponía a tomar notas para este artículo, Lopez Oliver dijo que todo lo que estaba diciendo era off the record, o sea, no para publicar, porque la compañía ya no era suya, sino de sus hijos.

Linkedin tiene un perfil bajo el nombre de Pedro Ramón López Oliver que dice: “Presidente, Oliver & Oliver [desde] junio de 1994 [hasta el] presente, 25 años 1 mes”.

A la solicitud del reportero de que les pidiera entonces a sus hijos o al diseñador del envase del ron Oliver’s Presidente Martí comunicarse con nosotros, López Oliver dijo que lo haría.

Este martes, aún sin haber tenido noticia de ninguna de esas personas, el reportero llamó en vano a López Oliver, que tampoco respondió dos mensajes de texto.

El lunes, radiotelevisionmarti.com se había comunicado con la Oficina Cubana de la Propiedad Industrial (OCPI) en La Habana, y tuvo acceso al despacho de su Directora General, María de los Ángeles Sánchez Torres. Según EcuRed, el Departamento de Marcas de la OCPI se ocupa fundamentalmente de “conferir o no los derechos relacionados con las marcas, nombres comerciales, lemas comerciales, rótulos de establecimiento, emblemas empresariales y las denominaciones de origen”.

Pagina de la Oficina Cubana de la Propiedad Industrial en Facebook.

Alguien que se presentó como secretaria de Sánchez Torres, Yuleisy, sugirió que le enviáramos un mensaje de email, y así lo hicimos poco después de las 2 de la tarde del mismo lunes.

Ese mensaje incluía estas preguntas: “¿Está su oficina al tanto del uso comercial de una marca de patrimonio estatal cubano? De ser así, ¿lo han autorizado ustedes, o la compañía radicada en RD, Oliver & Oliver, lo está haciendo sin autorización? En caso de no haber sido autorizados, ¿emprenderá su oficina alguna acción legal o reclamación de algún tipo?”

Siete días después, La Habana sigue guardando silencio.

Y Nueva York también.

La semana pasada, el reportero llamó a las oficinas de Chatham Imports Inc., la firma comercializadora del “Martí Auténtico” en todas sus variantes (Mojito, Coconut, Dorado Especial, Platino Superior), cuyas etiquetas muestran también el Martí del peso cubano, aunque en menor tamaño. Hablamos con Emily, quien prometió pasar nuestra pregunta a alguien que pudiera responderla.

El miércoles nadie había devuelto la llamada y volvimos a hablar con Emily, quien de nuevo dijo que sí, que alguien nos llamaría. Pero no.

En 1996, el empresario británico Joe Grahame, que había iniciado la producción y venta de una cerveza con el nombre de “Che”, dijo haber suspendido su comercialización por quejas del gobierno cubano, dispuesto a “frenar el uso comercial del héroe revolucionario”, según reportó entonces la agencia Reuters.

Curiosamente, poco antes, Estados Unidos había prohibido la importación de “Che” porque para hacerla se usaba materia prima de Cuba. Además, cuando la firma suiza SMH puso en sus relojes Swatch una imagen de Guevara, recibió una orden de 10,000 unidades remitida por el gobierno cubano, de acuerdo con la misma fuente.

Hasta donde sabemos, López Oliver y la que entonces era su esposa, Teresa Saldise, salieron de Estados Unidos a principios de la década de los 90 del siglo pasado y nunca han regresado.

El 18 de mayo de 1992, la Corte Federal de Apelaciones del Onceno Circuito recibió el recurso presentado por la Oficina de Supervisión de Ahorros (OTS, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro, que apelaba la negativa de una corte de distrito a su petición de congelar los bienes de Pedro López, Teresa Saldise y Ramón López, padre del primero y fundador de las Óptica Lopez.

De acuerdo con el caso, dos semanas antes los tres recibieron una notificación de OTS que acusaba a Pedro López y a Saldise de comprar más acciones de las permitidas por la ley en General Bank, el banco donde él era Presidente de la Junta Ejecutiva y ella Directora. “Ilegalmente tomaron control del banco al adquirir más del 25 por ciento de sus acciones sin aprobación de los reguladores”, indica el texto legal.

Un sitio de internet que reúne datos de bancos en EEUU informa que General Bank, localizado en 3099 SW de la Calle Ocho, fue absorbido por el gobierno federal el 16 de noviembre de 1989, más de nueve años después que lo fundaran el 28 de julio de 1980.

Una decisión final de OTS fechada el 17 de mayo de 1994 ordenaba que López y Saldise restituyeran conjuntamente al banco más de nueve millones de dólares, que él pagara adicionalmente casi 140 mil dólares con intereses por cada día a partir del 1ro de abril de 1993, y que los dos abonaran una multa de $4,860,187.

Pero ya entonces López y Saldise estaban fuera de Estados Unidos con más de un caso pendiente ante la justicia. El 18 de julio de 1992, El Nuevo Herald reportaba que Saldise envió desde Madrid un certificado médico a un tribunal de Tallahassee donde debía haberse presentado la semana previa, y que reguladores federales estaban revisando los libros de su firma de seguros First Miami Insurance, confiscada por las autoridades, “para determinar si Saldise y su esposo, Pedro Ramón López, sustrajeron efectivo de la compañía antes de abandonar el país”.

Otra información del Herald, ésta fechada el 14 de julio de 1992, apunta que Saldise era la presidenta y López Oliver el director de la aseguradora, y que “cientos de choferes se han quejado de que First Miami Insurance se negaba a cubrir las reclamaciones de las pólizas”.

De acuerdo con la ficha aparecida en su blog personal, Pedro Ramón López Oliver nació en Santa Clara en 1945, y en 1961 se exilió en Estados Unidos. Dice que, luego de haber vivido en Wilmington, Miami, San Juan y París, reside actualmente entre Madrid y Santo Domingo, “donde ejerce como empresario privado y como comentarista de televisión, además escribe sobre temas políticos y pinta con fruición la figura de José Martí”.