Elon Musk restableció el sábado la cuenta de Donald Trump en Twitter, revirtiendo una prohibición que mantenía al expresidente fuera de esa red social desde que una turba de partidarios de Trump atacó el Capitolio de Estados Unidos el 6 de enero de 2021, cuando el Congreso estaba a punto de certificar la victoria electoral de Joe Biden.
Musk hizo el anuncio por la noche tras realizar una encuesta en la que se pedía a los usuarios de Twitter que pulsaran “sí” o “no” sobre si la cuenta de Trump debía ser restaurada. Ganó el “sí”, con un 51,8%.
Previamente, Musk habia dicho que Twitter establecería nuevos procedimientos y un “consejo moderador de contenidos” antes de decidir la restauración de las cuentas suspendidas.
“El pueblo ha hablado. Trump será restablecido. Vox Populi, Vox Dei”, tuiteó Musk, usando una frase latina que significa “la voz del pueblo, la voz de Dios”.
Poco después, la cuenta de Trump, que anteriormente aparecía como suspendida, reapareció en la plataforma, con todo y sus tuits anteriores: más de 59.000. Al menos inicialmente, sus seguidores estaban desaparecidos, pero en una media hora rebasaron los dos millones.
Musk, director general de Tesla, restableció la cuenta menos de un mes después de que tomó el control accionario de Twitter y cuatro días después de que Trump anunciara su candidatura para la contienda presidencial de 2024.
No está claro si Trump realmente regresaría a Twitter. Un tuitero incontenible antes de que se prohibiera su cuenta, Trump ha dicho anteriormente que no volvería a esa plataforma incluso si su cuenta era restablecida. El exmandatario ha estado confiando en su propia red social, mucho más pequeña, Truth Social, que lanzó después de ser bloqueado de Twitter.
Y el sábado, durante un discurso en video a una reunión del grupo judío republicano en Las Vegas, Trump dijo que estaba al tanto de la encuesta de Musk, pero que veía “muchos problemas en Twitter”, según la agencia Bloomberg.
“He oído que estamos recibiendo una gran votación para que también volvamos a Twitter. No lo creo, porque no veo ninguna razón para ello”, afirmó Trump, citado por Bloomberg. “Puede que lo haga, puede que no”, añadió, aparentemente refiriéndose a los recientes trastornos internos de Twitter.
La perspectiva de que se restaurara la cuenta de Trump en la plataforma comenzó a sopesarse luego de que Musk concretó la compra de Twitter el mes pasado, una adquisición que ha avivado la preocupación generalizada de que el propietario multimillonario permitirá que los promotores de mentiras y desinformación florezcan en el sitio. Musk ha expresado con frecuencia su creencia de que Twitter se ha vuelto demasiado restrictivo en cuanto a la libertad de expresión.
Sus pasos para reestructurar la plataforma han sido rápidos y caóticos. Musk ha despedido a muchos de los 7.500 trabajadores de tiempo completo de la compañía y a un número incalculable de contratistas que eran responsables de la moderación del contenido y otras responsabilidades que se consideraban cruciales para mantener la credibilidad de la red. Su exigencia de que los empleados restantes se comprometieran a un trabajo “extremadamente duro” provocó una ola de renuncias, incluidos cientos de ingenieros de software.
Los usuarios de Twitter han reportado un aumento de spam y estafas, tanto en los tuits como en sus mensajes directos, entre otros problemas, luego de los despidos masivos y del éxodo de trabajadores. Algunos programadores que fueron despedidos o renunciaron esta semana advirtieron que Twitter podría desmoronarse pronto, a tal grado que podría colapsar.
La encuesta en línea de Musk, publicada en su propia cuenta de Twitter, captó más de 15 millones de votos durante sus 24 horas de duración.
Musk reconoció que los resultados carecen de rigor científico. “Los ejércitos de bots y trolls podrían quedarse sin fuerzas en breve”, tuiteó el magnate el sábado en la mañana. “Algunas lecciones interesantes para mejorar futuras encuestas”.
No es la primera vez que Musk emplea Twitter para efectuar encuestas relacionadas con decisiones de negocios. El año pasado vendió millones de acciones de Tesla de su propiedad tras consultar con sus seguidores si debía hacerlo.
La representante federal demócrata Alexandria Ocasio-Cortez, de Nueva York, respondió a la encuesta de Musk sobre Trump publicando en Twitter un video de la insurrección del 6 de enero.
La legisladora tuiteó el viernes que cuando Trump estuvo en Twitter anteriormente, la plataforma “fue utilizada para incitar una insurrección, muchas personas murieron, casi asesinan al vicepresidente de Estados Unidos, y cientos resultaron heridos, pero supongo que eso no basta a usted como respuesta a la pregunta. Es una encuesta de Twitter”.
Trump perdió su acceso a Twitter dos días después de sus simpatizantes tomaran por asalto el Capitolio, poco después de que el exmandatario les pidieran “pelear como demonios”.
Twitter le canceló la cuenta después de que Trump escribiera un par de tuits que según la compañía aumentaban las dudas sobre la legitimidad de la elección presidencial y los peligros para la inauguración presidencial de Biden.
Tras el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021, Trump también fue echado de Facebook e Instagram, propiedad de Meta Platforms, y de Snapchat. También fue suspendida la capacidad de Trump para publicar videos en su canal de YouTube. Facebook se dispone a reconsiderar en enero la suspensión de la cuenta de Trump.
La forma como Trump utilizó las redes sociales durante todo su periodo como mandatario supuso un importante desafío para las plataformas digitales que buscaban un equilibrio entre el interés del público de escuchar a funcionarios y las preocupaciones sobre desinformación, intolerancia, acoso e incitación a la violencia.
Sin embargo, en un discurso durante una conferencia sobre automóviles en mayo, Musk afirmó que la cancelación de la cuenta de Trump en Twitter fue una “decisión éticamente mala” y “tonta en extremo”.