El equipo L.A. Galaxy estuvo a punto de hacer la noche perfecta ante el Inter Miami, pero como diría un viejo narrador deportivo, a punto no se apunta.
El Galaxy, cinco veces campeón de la MLS, vendió por completo el aforo en el Dignity Health Sports Park, con capacidad para 27 mil fanáticos, a precios que oscilaban entre 311 y 1,105 dólares, aprovechándose de la visita del astro argentino Lionel Messi.
Encima de la enorme ganancia económica que le reportó el partido, el dueño de casa estuvo a minutos de llevarse un gran triunfo, hasta que el propio Messi le aguó la fiesta y frotó la lámpara mágica, para rescatar al Inter de una derrota inminente y arañar un empate con agonía.
El resultado 1-1 no refleja la realidad sobre la cancha, pues el Galaxy hizo mucho más por la victoria. Y si no la consiguió, más allá del gol tardío de Messi en tiempo de descuento, fue por la extraordinaria faena del arquero Drake Callender.
En el minuto 11 de la primera mitad, Sergio Busquets cometió falta dentro del área sobre el ghanés Joseph Paintsil y el árbitro sancionó penal para el equipo angelino.
El español Riqui Puig cobró el castigo y Callender detuvo el disparo que habría significado el 1-0.
Dos minutos más tarde, el guardametas de Miami volvió a lucirse, al tapar de manera seguida remates del uruguayo Martín Cáceres y el serbio Dejan Joveljic.
El Inter mostraba preocupantes grietas en la defensa y se veía desorganizado en el ataque, incapaz de provocar preocupación al portero John McCarthy, salvo un remate desde fuera del área de Messi, en el minuto 38.
Así, con el marcador intacto, los dos equipos se fueron al descanso.
El segundo tiempo fue copia del primero, con el Galaxy al ataque y Miami conteniendo a duras penas cada ofensiva rival.
La Pulga trataba de generar algo de manera individual y en el 61 remató con la derecha desde el centro del área, directo a las manos de McCarthy.
El argentino lo volvería a intentar en el 69, esta vez desde fuera del área, pero tampoco resultó.
En el 71, volvía a brillar Callender, al desviar un balón con etiqueta de gol, cortesía de Paintsil, y en el 75, desvío un cañonazo de Puig y quedó tendido sobre la grama.
Mark Delgado aprovechó el rechazo y pasó cruzado a Joveljic, quien mandó la pelota al fondo de las redes, para el 1-0.
En el 88, Delgado fue expulsado por doble tarjeta amarilla y el Galaxy se quedó con diez hombres en la cancha, mientras se anunciaban siete minutos de alargue.
Fue entonces que apareció el genio, al combinarse con su viejo amigo Jordi Alba en una frenética secuencia de cinco toques entre ellos, y de punta, Messi la empujó adentro en el minuto 92, para su primer gol de la temporada.
Con este empate, Miami llegó a cuatro puntos y encabeza la Conferencia Este de la MLS, mientras que el Galaxy tuvo que conformarse con una raya en su primer partido de la temporada.
A pesar de mantener su invicto, el Inter volvió a generar demasiadas dudas defensivas ante un rival que lo superó en velocidad y entrega, aunque no supo definir las muchas oportunidades que creó.
El próximo sábado 2 de marzo, Messi y compañía regresan a su casa del Chase Stadium, en Fort Lauderdale, para el derby floridano ante el Orlando City SC.