Unas 500 personas marcharon por el Malecón y La Rampa al ritmo de congas y portando carteles para expresar su apoyo a la lucha contra la discriminación por orientación sexual.
Unas 500 personas, disfrazadas de hawaianas o abrazando banderas con los colores del arcoíris, cientos de homosexuales, bisexuales, travestis y transexuales abarrotaron este sábado la avenida más concurrida del centro de La Habana al ritmo de congas y portando carteles para expresar su apoyo a la lucha contra la homofobia y la discriminación por orientación sexual.
El desfile "Conga Cubana contra la Homofobia" que organiza anualmente el Centro de Educación Sexual (CENESEX), presidido por Mariela Castro, hija del gobernante cubano "Raúl Castro" con motivo del día mundial contra la homofobia cada 17 de mayo, contó este año con reconocidos activistas de Latinoamérica.
Junto a Mariela Castro, directora del CENESEX, encabezaron la marcha la secretaria general de la Asociación Internacional de lesbianas, gays, bisexuales, transexuales e intersex para América Latina y el Caribe, la mexicana Gloria Careaga, y el chileno Víctor Hugo Robles, apodado "El Che de los gays".
Al cierre del desfile, la hija de Raúl Castro afirmó que la sociedad cubana avanza en la lucha de los derechos de la comunidad LGBTI, pero agregó que aún hay "resistencia" a pesar de lo que denominó como "naturaleza inclusiva de la revolución".
"¡Abajo la homofobia!" y "¡Socialismo sí, homofobia no!" coreaban los participantes, que agitaban banderas con los colores del arcoíris de distintos tamaños, entre ellas una de unos 15 metros, ante miradas y comentarios que iban desde la aprobación y la indiferencia hasta la burla.
"La sociedad cubana avanza en esta lucha, son cada vez más las instituciones y los grupos sociales que nos apoyan, aunque enfrentamos todavía resistencias", dijo Mariela Castro, hija del presidente cubano, quien encabezó la actividad realizada en el marco de la VII Jornada contra la Homofobia que comenzó el viernes.
La sexóloga de 52 años y directora del Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex) marchó junto con Gloria Careaga, cosecretaria general de la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Transexuales e Intersexuales (ILGA), organización que celebró esta semana un encuentro regional en la isla.
"Es realmente maravilloso ver cómo ha crecido esta celebración", declaró a la AFP la dirigente mexicana de ILGA, una organización con sede en Ginebra fundada en 1978 e integrada por 1.200 instituciones de todo el mundo.
Según ella, Argentina y Uruguay -que legalizaron el matrimonio entre homosexuales en 2010 y 2013 respectivamente- son los países "que más han avanzado en la protección de los derechos" de gays, bisexuales y transexuales en la región, y Cuba les sigue.
Dos compañías profesionales de danza con sus músicos se sumaron este año a la actividad dándole más colorido a la conga, un género muy popular en la provincia de Santiago de Cuba, 900 km al sureste de La Habana. Allí, con sus atuendos multicolores, los grupos compiten entre sí durante el carnaval, en una tradición legada por sus ancestros, esclavos venidos de África.
"La idea de insertar a profesionales hace que la lucha contra la homofobia retumbe y se sienta en todos los rincones" opinó el bailarín de 31 años Yunier Valera, gay y miembro de la compañía Raíces Africanas.
La homosexualidad, tradicionalmente estigmatizada en Cuba, fue reprimida con dureza tras el triunfo de la revolución de Fidel Castro en 1959, con internaciones en campos de trabajo en los años 60 y fuerte marginación durante el llamado "quinquenio gris" de los 70.
Sin embargo, en los últimos años el Cenesex ha realizado una labor de reivindicación de los derechos de los homosexuales, y ahora muchos se declaran incluso partidarios del Gobierno.
En la isla existen además pequeños grupos de homosexuales opositores, que no participan en la tradicional conga.
El desfile "Conga Cubana contra la Homofobia" que organiza anualmente el Centro de Educación Sexual (CENESEX), presidido por Mariela Castro, hija del gobernante cubano "Raúl Castro" con motivo del día mundial contra la homofobia cada 17 de mayo, contó este año con reconocidos activistas de Latinoamérica.
Junto a Mariela Castro, directora del CENESEX, encabezaron la marcha la secretaria general de la Asociación Internacional de lesbianas, gays, bisexuales, transexuales e intersex para América Latina y el Caribe, la mexicana Gloria Careaga, y el chileno Víctor Hugo Robles, apodado "El Che de los gays".
Al cierre del desfile, la hija de Raúl Castro afirmó que la sociedad cubana avanza en la lucha de los derechos de la comunidad LGBTI, pero agregó que aún hay "resistencia" a pesar de lo que denominó como "naturaleza inclusiva de la revolución".
"¡Abajo la homofobia!" y "¡Socialismo sí, homofobia no!" coreaban los participantes, que agitaban banderas con los colores del arcoíris de distintos tamaños, entre ellas una de unos 15 metros, ante miradas y comentarios que iban desde la aprobación y la indiferencia hasta la burla.
"La sociedad cubana avanza en esta lucha, son cada vez más las instituciones y los grupos sociales que nos apoyan, aunque enfrentamos todavía resistencias", dijo Mariela Castro, hija del presidente cubano, quien encabezó la actividad realizada en el marco de la VII Jornada contra la Homofobia que comenzó el viernes.
La sexóloga de 52 años y directora del Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex) marchó junto con Gloria Careaga, cosecretaria general de la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Transexuales e Intersexuales (ILGA), organización que celebró esta semana un encuentro regional en la isla.
"Es realmente maravilloso ver cómo ha crecido esta celebración", declaró a la AFP la dirigente mexicana de ILGA, una organización con sede en Ginebra fundada en 1978 e integrada por 1.200 instituciones de todo el mundo.
Según ella, Argentina y Uruguay -que legalizaron el matrimonio entre homosexuales en 2010 y 2013 respectivamente- son los países "que más han avanzado en la protección de los derechos" de gays, bisexuales y transexuales en la región, y Cuba les sigue.
Dos compañías profesionales de danza con sus músicos se sumaron este año a la actividad dándole más colorido a la conga, un género muy popular en la provincia de Santiago de Cuba, 900 km al sureste de La Habana. Allí, con sus atuendos multicolores, los grupos compiten entre sí durante el carnaval, en una tradición legada por sus ancestros, esclavos venidos de África.
"La idea de insertar a profesionales hace que la lucha contra la homofobia retumbe y se sienta en todos los rincones" opinó el bailarín de 31 años Yunier Valera, gay y miembro de la compañía Raíces Africanas.
La homosexualidad, tradicionalmente estigmatizada en Cuba, fue reprimida con dureza tras el triunfo de la revolución de Fidel Castro en 1959, con internaciones en campos de trabajo en los años 60 y fuerte marginación durante el llamado "quinquenio gris" de los 70.
Sin embargo, en los últimos años el Cenesex ha realizado una labor de reivindicación de los derechos de los homosexuales, y ahora muchos se declaran incluso partidarios del Gobierno.
En la isla existen además pequeños grupos de homosexuales opositores, que no participan en la tradicional conga.