Continúan los maltratos, violaciones de sus derechos y la pésima atención médica que padecen los presos condenados por su participación en las protestas populares del 11 de julio, según declaraciones de sus familiares a Radio Televisión Martí.
Lizandra Góngora Espinosa, madre de cinco niños, sentenciada a 14 años de cárcel por su participación en las protestas en Güira de Melena, en la provincia de Artemisa, sigue en celda de castigo en la prisión del Guatao, donde ahora será llevada a una corte en el penal, luego de una provocación realizada por una presa común bajo las órdenes de la policía política, señaló su esposo, Ángel Delgado.
“61 días lleva en celda de castigo en el hospitalito de la prisión. Me llamó y me dijo que había tenido problema con una común, la que dijo que Lizandra estaba hablando mal de la revolución. Debido a eso será llevada a corte y veremos que castigo le imponen”, explicó su esposo.
Mientras, el periodista Jorge Bello, sentenciado a 15 años de prisión, recibió visita familiar este lunes en el penal Combinado del Este, donde sigue el acoso de las autoridades en su contra, advirtió su madre, Martha Domínguez.
“Jorge está sufriendo de bronquitis y asma. No hay medicamentos [en la cárcel], ni tampoco permiten llevarlos. La comida de la prisión es un sancocho, también sigue con los problemas en la visión, debido a la diabetes, y no lo han llevado al oftalmólogo. El hostigamiento en su contra es todo el tiempo. No lo dejan escribir cartas a su familia, no permiten llevarle papel y lápiz. El día de la visita, la misma dura unas tres horas, y en un cuarto solo, y el guardia alrededor de nosotros mirándolo todo”, describió la señora.
Your browser doesn’t support HTML5
Este lunes, la Fiscalía Provincial de Villa Clara emitió un veredicto contra José Rodríguez Herrada, que cumple tres años y medio por el delito de desórdenes públicos en la prisión La Pendiente, en Santa Clara, dejando sin efecto el reclamo que la familia había realizado a la sala judicial en contra de la jueza que lo juzgó y los testigos de la fiscalía, por emitir falsos testimonios, informó su esposa, Yaquelín Licor.
Lee también Presos en Cuba a merced de sus carceleros: les niegan hasta el derecho de asistir al velorio de su madre“En el documento que me enviaron se expresa que la referencia de la sentencia se corresponde con las declaraciones que constan en el acta del juicio oral, incluyendo la de los testigos de la fiscalía que se presentaron, algo que no es cierto, porque en el juicio la jueza tergiversó las declaraciones de los cuatro testigos. Es muy injusto lo que han hecho con mi esposo, porque pensar diferente no es delito, y desde el 11 de julio, que cayó preso, ya ha realizado cuatro huelgas de hambre”, explicó la esposa de Herrada.
Por otro lado, Liván Hernández Sosa, sentenciado a cuatro años de condena en la prisión de Guamajal, ubicada en Santa Clara, está en celda de castigo por reclamar asistencia médica, reportó el periodista independiente Guillermo del Sol.
“Liván está presentando el problema de una fístula, con fiebre alta y mucho dolor y malestar. Comenzó a protestar, reclamando atención médica, razón por la que fue trasladado para una celda de castigo, pese a su estado de salud”, dijo el comunicador.