Maduro acepta reunirse este martes con la oposición

Maduro acepta la propuesta de la Unasur de reunirse este martes con la oposición.

El diputado opositor venezolano Pedro Pablo Fernández calificó como un hecho "muy positivo" el anuncio y consideró la mediación de los cancilleres de Unasur como "algo que puede ayudar mucho".
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aceptó este lunes reunirse con una delegación de la oposición el martes a pedido de una comisión de la Unasur, que visita Caracas para promover el diálogo tras dos meses de protestas contra el gobierno.

"Tuvimos una conversación bastante amplia. Ellos me propusieron hacer una reunión mañana (martes) con la delegación de la oposición y yo acepté", dijo Maduro al término de un encuentro de más de una hora con ocho cancilleres de la Unión Sudamericana de Naciones (Unasur) que visitan Caracas.

La tarde de este lunes, los ministros de Relaciones Exteriores de la Unasur se reunían con la coalición opositora de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), a la que el mandatario no ha logrado convocar a un diálogo en más de dos meses de disturbios, con saldo de 39 muertos y unos 600 lesionados.

"Si esa reunión (entre el jefe de Estado y los opositores) termina de concretarse hoy en la tarde, va a ser un gran mensaje de paz, de democracia, de nuestro país a todo nuestro pueblo", dijo Maduro a periodistas en el palacio de Miraflores, donde se citó con los cancilleres.

"Ojalá los dirigentes políticos de la MUD no se echen para atrás y se sienten" a dialogar, expresó el gobernante, quien anticipó que esperará a que la Unasur anuncie el lugar y la hora de la cita. "Estoy seguro que la agenda será libre", agregó.

Maduro, quien cumplirá un año como presidente este 19 de abril, acudió a la Unasur para allanar el camino al diálogo con la oposición, que se ha resistido a participar en la "conferencia nacional por la paz" instalada a finales de febrero por el mandatario con varios sectores a raíz de las manifestaciones.

El presidente aseguró que planteará a la oposición como prioridades del diálogo "abordar el plan de pacificación nacional", exhortar a "la oposición a que se sumen a luchar contra la criminalidad" e impulsar un "plan de inversiones y desarrollo económico" para el crecimiento y el abastecimiento.

Entre este lunes y martes la comisión de diplomáticos acudirá a una nueva serie de reuniones con diferentes sectores de la sociedad venezolana, luego de visitar el país la última semana de marzo, cuando logró que Maduro y la oposición acordaran que un "testigo" facilite el diálogo.

Uno de los candidatos más nombrados por ambos sectores es el secretario de Estado del Vaticano y ex nuncio en Venezuela, Pietro Parolin.

Diputado opositor ve "muy positivo" que Maduro acepte reunirse


El diputado opositor venezolano Pedro Pablo Fernández calificó como un hecho "muy positivo" el anuncio realizado hoy por el presidente de su país, Nicolás Maduro, de que se reunirá con parte de la oposición a instancias de la Unasur y calificó esta mediación como "algo que puede ayudar mucho".

En declaraciones a Efe en Montevideo, en donde participaba en una sesión plenaria del Parlamento del Mercosur (Parlasur) en la que precisamente tuvo como eje el debate sobre la situación en
Venezuela, Fernández señaló que con este paso "se está en la instancia correcta para tener una primera aproximación".

"Unasur ha sido una buena instancia, una tercera parte con la que Gobierno y oposición se han sentado y han tenido una actitud bien positiva desde el principio", indicó.

Para el legislador, ahora lo que falta es "avanzar en una agenda de diálogo", ya que reunirse no es el objetivo, sino "obtener cosas concretas que puedan resolver la situación política y económica que vive Venezuela".

Maduro acusa a la oposición de promover un golpe de Estado con las protestas, en tanto la MUD responsabiliza al gobierno del encarcelamiento del opositor Leopoldo López, líder del partido Voluntad Popular, y de dos alcaldes, así como de la reciente destitución de la diputada María Corina Machado.

Las protestas se iniciaron el 4 de febrero en rechazo a la inseguridad y se ampliaron a varias ciudades incorporando reclamos por la crisis económica, la represión de las protestas y la detención de estudiantes y dirigentes opositores del ala radical que propugnaron la renuncia del jefe de Estado.

Pese a que las protestas bajaron de intensidad, aún quedan focos de violencia en algunas localidades, como en los municipios opositores de Chacao y Baruta (este de Caracas), donde este fin de semana volvieron a registrase choques entre manifestantes radicales y la fuerza pública.