Lula fue excluido del juicio por sobornos y negó siempre conocer la existencia de un plan de compra de votos de diputados de la coalición organizado por su partido.
Las denuncias contra el expresidente Luiz Inacio Lula da Silva (2003-2010) de un condenado en un juicio por corrupción son "falacias", aseguró el miércoles el ministro de la Secretaría General de la Presidencia brasileña, Gilberto Carvalho.
"No estamos preocupados porque el (ex) presidente Lula no tiene ninguna participación y ni siquiera conocimientos de estos hechos", dijo Carvalho, amigo de Lula y también su exjefe de gabinete, citado por Agencia Brasil (estatal).
Marcos Valerio, un publicista condenado por la Corte Suprema a 40 años de prisión por su participación en la red de corrupción que desvió dineros públicos para sobornar diputados durante el primer gobierno Lula, dijo haber realizado dos transferencias al exmandatario, una por unos 50.000 dólares, para sus "gastos personales".
De acuerdo con el diario O Estado de Sao Paulo, Valerio también aseguró a la fiscalía que Lula le dio "el ok" en una breve reunión para contraer préstamos bancarios cuyos recursos, según la Corte Suprema, fueron desviados para sobornar congresistas.
"Fui jefe de gabinete del presidente Lula durante ocho años. Sé quién entró y quién dejó de entrar en ese despacho. Ese señor (Marcos Valerio) nunca pisó ese despacho. El presidente Lula nunca se encontró con ese señor", dijo Carvalho a periodistas en Brasilia.
Lula fue excluido del juicio y negó siempre conocer la existencia de un plan de compra de votos de diputados de la coalición organizado por su partido. El martes, en París, dijo que las denuncias de Valerio son "mentiras".
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, también en París, saltó asimismo a la defensa de su padrino político y dijo que las denuncias contra Lula son "lamentables" intentos por "desgastar su imagen".
El presidente de la Corte Suprema, Joaquim Barbosa, estimó no obstante que la fiscalía debe investigar las acusaciones de Valerio contra Lula. "Creo que sí", dijo Barbosa consultado al respecto por la prensa, que aseguró tener conocimiento "no oficial" del asunto, según Agencia Brasil.
La Corte Suprema condenó a 25 empresarios y políticos en el marco de este juicio que se inició en agosto y cuyo final está previsto para las próximas semanas.
"No estamos preocupados porque el (ex) presidente Lula no tiene ninguna participación y ni siquiera conocimientos de estos hechos", dijo Carvalho, amigo de Lula y también su exjefe de gabinete, citado por Agencia Brasil (estatal).
Marcos Valerio, un publicista condenado por la Corte Suprema a 40 años de prisión por su participación en la red de corrupción que desvió dineros públicos para sobornar diputados durante el primer gobierno Lula, dijo haber realizado dos transferencias al exmandatario, una por unos 50.000 dólares, para sus "gastos personales".
De acuerdo con el diario O Estado de Sao Paulo, Valerio también aseguró a la fiscalía que Lula le dio "el ok" en una breve reunión para contraer préstamos bancarios cuyos recursos, según la Corte Suprema, fueron desviados para sobornar congresistas.
"Fui jefe de gabinete del presidente Lula durante ocho años. Sé quién entró y quién dejó de entrar en ese despacho. Ese señor (Marcos Valerio) nunca pisó ese despacho. El presidente Lula nunca se encontró con ese señor", dijo Carvalho a periodistas en Brasilia.
Lula fue excluido del juicio y negó siempre conocer la existencia de un plan de compra de votos de diputados de la coalición organizado por su partido. El martes, en París, dijo que las denuncias de Valerio son "mentiras".
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, también en París, saltó asimismo a la defensa de su padrino político y dijo que las denuncias contra Lula son "lamentables" intentos por "desgastar su imagen".
El presidente de la Corte Suprema, Joaquim Barbosa, estimó no obstante que la fiscalía debe investigar las acusaciones de Valerio contra Lula. "Creo que sí", dijo Barbosa consultado al respecto por la prensa, que aseguró tener conocimiento "no oficial" del asunto, según Agencia Brasil.
La Corte Suprema condenó a 25 empresarios y políticos en el marco de este juicio que se inició en agosto y cuyo final está previsto para las próximas semanas.