Altos cargos libaneses han instado a Washington y París a que presionen a Israel para que mantenga al alto al fuego, tras decenas de operaciones militares en suelo libanés que Beirut ha considerado violaciones, dijeron el martes a Reuters dos altas fuentes políticas libanesas.
Los mortíferos ataques israelíes contra el sur de Líbano y el lanzamiento de cohetes de Hezbolá contra un puesto militar israelí el lunes han puesto el alto al fuego entre ambos, mediado por Estados Unidos, en una situación cada vez más frágil menos de una semana después de su entrada en vigor.
El primer ministro provisional de Líbano, Najib Mikati, y el presidente del Parlamento, Nabih Berri, un estrecho aliado de Hezbolá que negoció el acuerdo en nombre de Líbano, hablaron con altos cargos de la Casa Blanca y de la presidencia francesa a última hora del lunes y expresaron su preocupación por el estado del alto el fuego, dijeron las fuentes.
Ni la Presidencia francesa, ni el Ministerio de Asuntos Exteriores, hicieron comentarios al respecto. El ministro francés de Exteriores, Jean-Noël Barrot, habló el lunes con su homólogo israelí, Gideon Saar, y le dijo que ambas partes debían respetar el alto el fuego.
El portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Matt Miller, dijo a la prensa el lunes que el alto el fuego "se mantiene" y que Estados Unidos había "previsto que podría haber violaciones".
La tregua entró en vigor el 27 de noviembre y prohíbe a Israel llevar a cabo operaciones militares ofensivas en Líbano, a la vez que exige a Líbano que impida a los grupos armados, incluido Hezbolá, lanzar ataques contra Israel. Da 60 días a las tropas israelíes para retirarse del sur de Líbano.
Un mecanismo de supervisión presidido por Estados Unidos se encarga de supervisar, verificar y ayudar a hacer cumplir la tregua, pero aún no ha empezado a trabajar.
El lunes, Berri instó a dicho mecanismo a que se asegurara "urgentemente" de que Israel pusiera fin a sus violaciones, afirmando que Beirut había registrado al menos 54 violaciones israelíes del alto el fuego hasta la fecha.
Israel afirma que su continua actividad militar en Líbano tiene por objeto hacer cumplir el alto el fuego y no viola sus obligaciones en virtud de la tregua.
Mikati se reunió el lunes en Beirut con el general estadounidense Jasper Jeffers, que presidirá el comité de supervisión, y subrayó la necesidad de que los efectivos israelíes se retiren rápidamente.
Dos fuentes familiarizadas con el asunto dijeron a Reuters que el representante de Francia en el comité, el general Guillaume Ponchin, llegará a Beirut el miércoles y que el comité celebraría su primera reunión el jueves.
"Es urgente finalizar el mecanismo, de lo contrario será demasiado tarde", dijo la fuente, refiriéndose a la intensificación gradual de los ataques por parte de Israel a pesar de la tregua.
Miller dijo que el mecanismo de supervisión comenzaría su trabajo "en los próximos días".
Al menos 12 personas murieron el lunes por ataques israelíes contra Líbano, según las autoridades libanesas, la jornada más mortífera desde la entrada en vigor del alto el fuego.
Entre ellas, seis personas en la ciudad meridional de Haris y otras cuatro en la meridional de Talusa, según el Ministerio de Sanidad libanés.