Los senadores Marco Rubio y Rick Scott, y el congresista Mario Díaz-Balart, se reunieron este jueves con líderes de la comunidad cubana, venezolana y colombiana en el sur de Florida para debatir sobre la necesidad de enviar ayuda humanitaria a Venezuela y apoyar al presidente interino, Juan Guaidó.
En el encuentro, celebrado en el restaurante “Las Vegas” del Doral, Scott dijo que el régimen de Nicolas Maduro es responsable de un “completo genocidio”, y lo responsabilizó de la muerte de miles de personas, incluyendo niños. El exgobernador de la Florida resaltó que Estados Unidos “cree en la libertad y la democracia, y va a luchar por esos conceptos”.
Marco Rubio subrayó que Maduro está acorralado y rodeado de mentirosos, conspiradores y ladrones. “El otro día circuló una foto de Maduro rodeado de 12 personas de su círculo íntimo, y yo concozco personalmente a cuatro que están conspirando para sacarlo del poder”, afirmó.
El senador cubanoamericano aclaró que Venezuela vive un movimiento pacífico de desobediencia civil. “Estos movimientos, la única batalla que ganan es la última (…). Pero no se trata solamente de quitar a Maduro, esto se trata de resturar el orden constitucional y la democracia en Venezuela. Yo sé que vamos a lograr la victoria. No pierdan la esperanza", subrayó.
Por su parte, Díaz-Balart señaló que “la opción militar por parte de Estados Unidos siempre está disponible" cuando es el momento de defender la seguridad nacional.
"El presidente Trump lo ha dicho reiteradamente, todas las opciones están sobre la mesa. Pero yo estoy convencido de que lo que es inevitable es la libertad del valiente pueblo de Venezuela. Primero Venezuela, pero ese cáncer dirigido desde La Habana y que incluye a Nicaragua y Bolivia se va a eliminar de este Hemisferio”, aseguró el congresista.
Varios oradores tomaron la palabra durante el conclave para hacer un llamado a continuar las estrategias de la denominada "Operación Libertad".