El gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela se equivoca gravemente si considera que la paciencia de Estados Unidos es infinita, declaró este jueves el subsecretario de Estado de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental, Brian A. Nichols, y reiteró que la administración Biden sigue "firmemente comprometida" con la restauración de la democracia en ese país.
"Estamos listos para retirar las sanciones, y listos para tomar medidas integrales", si las conversaciones no se reanudan y avanzan, dijo Nichols en una audiencia del Comité de Relaciones Exteriores del Senado que evaluó la política estadounidense hacia Venezuela.
Las conversaciones entre Maduro y el líder opositor Juan Guaidó se llevaron a cabo por última vez en la Ciudad de México, el año pasado, pero dieron poco resultado.
“Estados Unidos usará las diversas herramientas que ustedes nos han brindado: sanciones, acciones de aplicación de la ley. Trabajamos con nuestros socios y aliados para garantizar que el régimen no tenga acceso a los activos que actualmente están congelados o en poder del gobierno interino”, explicó Nichols cuando se le preguntó cuáles eran los planes de la administración ante la falta de progreso.
Asimismo, añadió que "el gobierno de Estados Unidos sigue firmemente comprometido con la creencia de que los venezolanos tienen derecho a la democracia y merecen un gobierno de su elección, que proteja y defienda su derechos humanos y libertades fundamentales".
Por su parte, el senador Bob Menéndez (D-NJ), presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, dijo que el grupo cree en la diplomacia y que apoya una solución negociada a la crisis de Venezuela, pero que “un trato unilateral por parte de la administración Biden con un régimen que secuestra a ciudadanos estadounidenses para aumentar su influencia es simplemente inaceptable”, así como “las concesiones unilaterales a un líder que tortura a sus oponentes políticos”.
Menéndez subrayó que Venezuela se está hundiendo cada vez más en una crisis, con un tráfico de drogas y una corrupción desenfrenados, mientras persiste una renovación de las conversaciones.
“Hasta donde puedo discernir, Maduro no ha hecho ninguna concesión significativa o pasos concretos para volver a las negociaciones en la Ciudad de México”, señaló.
Con él coincidió el republicano de mayor rango en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, el senador Jim Risch, quien dijo que “la administración está realizando esfuerzos defectuosos e incoherentes que fortalecen al régimen de Maduro”.
“En casi dos años, la administración no ha sancionado a una sola entidad o individuo vinculado al régimen de Maduro… De hecho, la administración está cediendo ante el régimen de Maduro al aliviar las sanciones sin ningún progreso concreto hacia el orden democrático”, concluyó Risch.