El secretario de Estado estadounidense John Kerry, se reunió este lunes en Colombia con el presidente venezolano, Nicolás Maduro, en el primer encuentro entre ambos desde que Kerry es canciller.
La reunión tuvo lugar en Cartagena de Indias, en el marco de la firma del acuerdo de paz entre el Gobierno colombiano y la guerrilla de las FARC que puso fin a décadas de guerra civil en el país.
Según el portavoz del Departamento de Estado, John Kirby, Kerry expresó a Maduro la preocupación de Estados Unidos sobre los retos económicos y políticos que afectan a millones de venezolanos.
El país con las mayores reservas petroleras del mundo enfrenta una severa escasez de alimentos y medicinas, y una inflación galopante, que el FMI calcula en 720% este año.
Además las encuestas señalan que ocho de cada 10 venezolanos quieren un cambio de gobierno, Maduro apuesta a resolver el desabastecimiento en corto plazo, con ayuda de los militares, para revertir su impopularidad de un 75% y completar el mandato en enero de 2019.
Por ello el secretario de Estado de EEUU, exhortó al presidente venezolano a trabajar constructivamente con los líderes de la oposición para enfrentar estos desafíos.
Kerry y Maduro acordaron además continuar las discusiones bilaterales que comenzaron recientemente.
Otra vez a la calle
La oposición venezolana convocó a una movilización nacional el 12 de octubre para exigir que el referendo revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro se realice en 2016, aunque el poder electoral lo postergó hasta 2017, descartando así elecciones anticipadas.
"Desbordaremos las calles de toda Venezuela de forma pacífica. El referendo es en 2016", aseguró este lunes el portavoz de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Jesús Torrealba, durante un acto en un parque del este de Caracas.
Como era previsible, el chavismo convocó también a contramarchas. "Nos vamos a la calle otra vez", anunció el dirigente oficialista Jorge Rodríguez, quien acusó a la MUD de buscar disturbios para desestabilizar al gobierno.
El Consejo Nacional Electoral (CNE), al que la MUD acusa de servir al gobierno, anunció el pasado miércoles que la oposición podrá recolectar el 26, 27 y 28 de octubre las cuatro millones de firmas (20% del registro de votantes) requeridas para llamar al referendo.
Pero aun si las consigue, precisó el CNE, la consulta se efectuará recién entre febrero o marzo próximos, lo que asegura al chavismo permanecer en el poder hasta las elecciones presidenciales de 2018, pues si el referendo se hace en 2017 y Maduro es revocado sería reemplazado por su vicepresidente.
"El referendo se hará este año, no hay razones técnicas ni jurídicas para que no sea así. Cualquier intento de bloquearlo se responderá en la calle", advirtió Torrealba, en el acto al que asistieron dirigentes políticos de todo el país, mientras Maduro inauguraba el año escolar, en cadena de radio y televisión.
Rodríguez fustigó que tras el anuncio del CNE "todavía existan dirigentes de la derecha que digan, a la brava, que va a haber referendo en 2016".
Para la MUD, la consulta es urgente porque la crisis económica es cada vez peor.