Israel confirmó el domingo que había recuperado los cuerpos de seis rehenes en Gaza, incluido el joven israelí-estadounidense, Hersh Goldberg-Polin, quien se convirtió en uno de los cautivos más conocidos de Hamas porque sus padres se reunían con líderes mundiales y presionaban por su liberación.
El ejército precisó que los seis habían muerto poco antes de la llegada de las fuerzas israelíes. Su recuperación provocó llamados a protestas masivas contra el primer ministro Benjamin Netanyahu, a quien muchos israelíes culpan por no haberlos devuelto con vida en un acuerdo con Hamas para poner fin a la guerra de 10 meses. Las negociaciones sobre un acuerdo de este tipo se han prolongado durante meses.
Netanyahu dijo que Israel responsabilizará a Hamas por matar a los rehenes a "sangre fría", y culpó al grupo militante por el estancamiento de las negociaciones, diciendo que "quienquiera que asesine a los rehenes no quiere un acuerdo".
Los milicianos capturaron a Goldberg-Polin, de 23 años, y a otros cuatro de los rehenes en un festival de música en el sur de Israel durante el ataque de Hamas el 7 de octubre, que desencadenó la guerra.
El oriundo de Berkeley, California, perdió parte de su brazo izquierdo a causa de una granada en el ataque. En abril, un video difundido por Hamas lo mostraba vivo pero sin su mano izquierda, lo que provocó nuevas protestas en Israel que instaban al gobierno a hacer más para garantizar la liberación de los rehenes.
El ejército identificó a los otros rehenes muertos como Ori Danino, de 25 años; Eden Yerushalmi, de 24 años; Almog Sarusi, de 27 años; y Alexander Lobanov, de 33 años. Ese grupo fue capturado en el mencionado festival musical. El sexto, Carmel Gat, de 40 años, fue secuestrado en la cercana comunidad agrícola de Be'eri.
Los cuerpos fueron recuperados de un túnel en la ciudad de Rafah, en el sur de Gaza, a casi un kilómetro de donde otro rehén, Qaid Farhan Alkadi, de 52 años, fue rescatado con vida la semana pasada.
El teniente coronel Nadav Shoshani, portavoz militar, dijo que el ejército creía que había rehenes en la zona, pero no tenía información específica. Dijo que las fuerzas israelíes encontraron los cuerpos a varias decenas de metros bajo tierra mientras se desarrollaba un "combate en curso", pero que no hubo tiroteo en el túnel en sí.
Dijo que no había duda de que Hamas los había matado.
Hamas ha ofrecido liberar a los rehenes a cambio del fin de la guerra, la retirada de las fuerzas israelíes y la liberación de un gran número de prisioneros palestinos, incluidos militantes de alto perfil.
Izzat al-Rishq, un alto funcionario de Hamas, dijo que los rehenes aún estarían vivos si Israel hubiera aceptado una propuesta de alto el fuego respaldada por Estados Unidos que Hamas dijo que había acordado en julio.
Netanyahu ha prometido continuar la guerra hasta que Hamas sea destruido y dice que se necesita presión militar para traer a casa a los rehenes.
El Canal 12 de Israel informó que se enzarzó en una pelea a gritos en una reunión del gabinete de seguridad el jueves por la noche con su ministro de Defensa, Yoav Gallant, quien lo acusó de priorizar el control de un corredor estratégico a lo largo de la frontera entre Gaza y Egipto -un importante punto de fricción en las conversaciones- sobre las vidas de los rehenes. Según los informes, el gabinete votó a favor de permanecer en el corredor a pesar de las objeciones de Gallant, quien dijo que evitaría un acuerdo de rehenes.
Un funcionario israelí confirmó el informe y dijo que tres de los rehenes, Goldberg-Polin, Yerushalmi y Gat, estaban programados para ser liberados en la primera fase de una propuesta de alto el fuego discutida en julio. El funcionario no estaba autorizado a informar a los medios sobre las negociaciones y habló bajo condición de anonimato.
"En nombre del Estado de Israel, llevo a sus familias cerca de mi corazón y les pido perdón", dijo Gallant el domingo después de que se recuperaron los restos. Más tarde pidió al Consejo de Ministros que revirtiera su decisión.
Un foro de familias de rehenes convocó a una protesta masiva el domingo, exigiendo un "cese completo del país" para presionar por la implementación de un alto el fuego y la liberación de los rehenes.
"Un acuerdo para la devolución de los rehenes ha estado sobre la mesa durante más de dos meses. Si no fuera por los retrasos, el sabotaje y las excusas, aquellos cuyas muertes supimos esta mañana probablemente todavía estarían vivos", dijo en un comunicado.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, que se ha reunido con los padres de Goldberg-Polin, dijo que estaba "devastado e indignado".
"Es tan trágico como reprobable", dijo. "No se equivoquen, los líderes de Hamas pagarán por estos crímenes. Y seguiremos trabajando día y noche para llegar a un acuerdo que garantice la liberación de los rehenes restantes".
La vicepresidenta Kamala Harris dijo que sus oraciones estaban con la familia Goldberg-Polin y condenó a Hamas.
(Prensa Asociada y Voz de América)