Este 17 de mayo la provincia de Sancti Spíritus será la sede del acto nacional por el día del campesino cubano, aniversario 65 de la firma de la Ley de Reforma Agraria y 63 de la creación de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP).
Sobre la efemérides destaca el diario estatal Granma, “que la alegría espirituana por ser sede del acto central, conlleve el ascenso productivo que, desde todo el archipiélago, necesitan la economía y la familia cubana”.
Al respecto agricultores independientes cubanos aseguraron a Martí Noticias que no hay nada que celebrar en este aniversario del día del campesino cubano.
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El líder de Liga de Campesinos Independientes de Cuba, Esteban Ajete Abascal, desde Pinar del Río, describe la realidad de los agricultores cubanos tras 65 años de revolución.
“El campesino cubano ya está viviendo una enfermedad terminal, los cultivos se le pierden por falta de utensilios de trabajo. Un campesino que está viendo día a día como estos apagones no les permite regar sus cultivos y se le pierde en el campo toda la cosecha, que después que logra la cosecha no puede cargarla por la misma falta de combustible, la misma falta de transporte, no puede sacarlo del campo y se le pudre”, destacó Ajete Abascal.
Desde la cooperativa Los Cristales, en Arroyo Blanco, en Jatibonico, provincia de Sancti Spíritus, el agricultor Vladimir Ríos Cruz, aseguró que el centralismo estatal acabó con las producciones agrícolas.
“Ya hay tristeza en los campos de Cuba, obtener beneficios de lo suyo cada vez es menos, el campesino no quiere, porque sencillamente cuando produce quieren comprárselo al precio que quiere el gobierno, y el gobierno lo que hace es obstaculizar”, advirtió Ríos Cruz.
La mujer rural cubana también está llena de dificultades dijo desde Guaro, en Mayarí, provincia de Holguín, Teresa Miranda Céspedes.
“El campesino lo único que hace es sufrir, las tierras no son de ellos, y después lo que produzcan, le exigen que se lo entreguen a ACOPIO, y a ver cuándo le pagan y la miseria que le pagan, y el que aún sigue allí pegado al surco se queja de que no tiene zapatos, que no tiene esto, que no tengo aquello, que lo que compro para recoger algo me cuesta carísimo, el campesino es un pobre esclavo”, opinó Miranda Céspedes.
Desde la zona del Horno, en Bayamo, en la provincia de Granma, el campesino independiente Emiliano González, mencionó otros problemas que enfrentan agricultores y ganaderos: el vandalismo y la falta de combustible.
“Hurto y sacrificio de ganado, prácticamente no hay animales de tracción para preparar la tierra, eso es todos los días cuando tú oyes una noticia que se metieron en casa de fulano, le robaron un caballo a fulano", dijo.
"Ya con la electricidad y el combustible como está, no hay regadíos y hay que esperar por la naturaleza, que llueva cuando Dios quiera, y entonces es cuando se pueda sembrar”, dijo el agricultor.