Gran Mancha de Júpiter: un fenómeno atmosférico gigantesco

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Tomado de un vídeo publicado en National Geographic

La Gran Mancha de Júpiter es un reciente fenómeno atmosférico gigantesco, un remolino causado por una gran tormenta que se generó hace tan sólo unos 300 años de antigüedad.

La NASA se mostró sorprendida por las altas temperaturas que está revelando la Gran Mancha de Júpiter, denominada también el Ojo de Júpiter.

Se trata de una crisis de fiebre. De ante mano se sabía que la gran mancha de Júpiter era la tormenta más grande y permanente del sistema solar.

Pero se ha descubierto que la gigantesca mancha roja de Júpiter genera calor y turbulencia, la cual causa ondas para calentar la atmósfera exterior del planeta.

De acuerdo con la investigación realizada por científicos de la Universidad de Leicester y la Universidad de Boston, la Gran Mancha Roja de Júpiter genera vientos que viajan a una velocidad de hasta 350 millas y se estima que su turbulencia atmosférica existe hace unos 300 años.

Los expertos utilizaron un espectrómetro del telescopio infrarrojo de la NASA para poder crear un mapa de la mancha que muestra la distribución de la temperatura a lo largo de sus franjas.

También descubrieron que la Gran Mancha Roja, la cual mide unas 10,000 millas, expulsa calor a unos 1,600 grados Kelvin que viaja arriba y causa una tormenta permanente.

Un artículo publicado por National Geographic a finales del pasado año recogió las declaraciones a la prensa de Amy Simon una científica planetaria del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la Naza en Greenbelt, Maryland sobre lo que estaba ocurriendo en ese planeta.

“Cada vez que vemos a Júpiter, descubrimos provocativas pistas de que está sucediendo algo realmente emocionante”, dijo Simon.

Júpiter es el planeta más grande del sistema solar y fácil de ver a simple vista, porque brilla intensamente en el firmamento.

Aunque a simple vista, Júpiter –localizado a 918 millones de kilómetros- luce como una estrella amarilla brillante, bastan unos binoculares y pulso firme para revelar sus cuatro lunas galileanas. Aparecerán dispuestas como una fila de patos junto al disco planetario, destacó National Geographic.