El preso político Félix Navarro denunció negligencia en la atención médica en el penal matancero Agüica.
En una grabación telefónica a la que Martí Noticias tuvo acceso, Navarro informó que el recluso común Roberto Pinto Pérez, enfermo del corazón, ha esperado más de seis meses a que un médico valore su estado.
“Desde la prisión de Agüica quiero comunicar que Roberto Pinto Pérez que es un preso que está aquí en [la cárcel] Agüica de Colón, Matanzas, pero es de Encrucijada, Villa Clara, desde diciembre tiene un marcapasos puesto. Desde diciembre 29 lo remitieron para el Cardiocentro de Villa Clara y aquí está todavía, pero algo peor, el lunes 17 de abril, el martes 16 de mayo y el martes 13 de junio tenía turno médico en el hospital Faustino Pérez de Matanzas y no lo llevaron”, afirmó el líder del Partido por la Democracia Pedro Luis Boitel, de la Mesa de la Unidad de Acción Democrática y del Compromiso Democrático.
“Lo tienen aquí ingresado en la enfermería, tal parece que la potencia médica cubana está esperando que se nos fuera [sic] Roberto Pinto Pérez”, alertó.
Los marcapasos se utilizan para tratar ciertos tipos de arritmias, así como la insuficiencia cardíaca, una condición que ocurre cuando el corazón no puede bombear suficiente sangre al cuerpo.
Según National Heart, Lung and Blood (NHLB) de Estados Unidos, las complicaciones que puede tener una persona, sin atención médica, con este tipo de dispositivo implantado son coágulos de sangre que bloqueen el flujo sanguíneo, problemas del dispositivo, problemas cardíacos, infección alrededor de los cables o del dispositivo del marcapasos que puede propagarse y causar problemas en otras partes del cuerpo, trastorno pleural, entre otras.
“Espero que el mundo se haga eco de esto y se resuelva la situación de salud de este cubano que es un preso común pero un ser humano que necesita atención médica”, instó el preso político.
No es la primera vez que Navarro relata los malos tratos contra los reos en la prisión Agüica, donde está encarcelado desde el 12 de julio de 2021 tras las protestas que se sucedieron por esos días en toda la Isla.
En llamadas grabadas y divulgadas, el prisionero político ha contado sobre el tratamiento deshumanizado y vejatorio de oficiales penitenciarios contra la población penal, ejecutados con la anuencia de la Fiscalía Militar.
El opositor, uno de los exprisioneros de conciencia de la Primavera Negra de Cuba, cumple una condena de 9 años de privación de libertad por los supuestos delitos de atentado y desorden público.