La presión que sienten los médicos cubanos en Brasil para que las familias que conviven con ellos regresen a la isla es cada vez mayor. El Ministerio de Salud de Cuba desde hace algunas semanas amenaza con sustituirlos por otros doctores si sus hijos y cónyuges no regresan a la isla.
Sin embargo, no se trata de un problema legal ni de deserción, sino de ambigüedad en los términos del contrato que los médicos cubanos firmaron para ejercer su labor en Brasil y de las visas que este país les concede a ellos y a sus familiares. Los plazos no coinciden, y por ello distintos doctores están denunciando la situación a la que se enfrentan y que podría desembocar en la pérdida de su puesto de trabajo o, en el mejor de los casos, verse alejados de su familia.
Martí Noticias pudo contactar con uno de esos médicos destinados en Brasil, que no quiso identificarse, y que confirmó las distintas visitas por parte de funcionarios del Ministerio de Salud para recordarles que sus familiares deberían abandonar el país en un plazo de 30 días. El Gobierno les informa, eso sí, que una vez que regresen a la isla pueden de nuevo viajar a Brasil por otros 30 días.
Este médico habló también de las represalias que se han tomado con algunos de los que se han negado a retornar con su familia. Se ha dado el caso de doctores que dejaron a sus familiares en Brasil para ir de vacaciones Cuba y, una vez allí, no les permitieron regresar. Ahora buscan el modo de financiar el regreso de su familia desde Brasil.
En una reciente visita de la Viceministra de Salud cubana a Sao Paulo, recordó ante unos 500 doctores con los que mantuvo un encuentro que sus allegados deberían retornar, y citó el hecho de que en Cuba "tenían otros 500 médicos preparados esperando para viajar en el caso de que no regresaran".
La esposa de este mismo galeno también precisó a Martí Noticias el modo en que actúan las autoridades cubanas. "Inicialmente nos tratan de persuadir de la manera más amigable posible para evitar conflictos", señala, y que "las personas se solidaricen para que sea una decisión propia, pero la mayoría no estamos de acuerdo" porque, recuerda, "lo más importante para todos es la familia, los hijos y el matrimonio".
Cuenta esta mujer que en los casos en los que no se accede a sus peticiones comienza otro tipo de presión. "No nos dicen directamente que vamos a ser desligados… pero sí que tienen más médicos preparados en Cuba y que se van a tomar medidas disciplinarias", asegura. "Es una manera indirecta pero muy clara de decirnos que vamos a ser desligados del programa", afirma.
Retornar a Cuba o perder el sustento económico
Las opciones para un cubano, en caso de rechazar este ultimátum y ser desvinculado de Más Médicos, no son muchas, asegura la esposa de este doctor que ha visto lo que sucedía con otros compañeros y su familia.
"Al depender tu pasaporte y tu permiso de trabajo de este programa, si te niegas a ello te ves abocado a una de las dos soluciones posibles, cada cual peor: O quedarte en Brasil ilegalmente y sin sustento económico –teniendo que huir a un tercer país– o regresar a Cuba y sufrir las represalias por ello, como trasladarte de tu centro de trabajo o denegarte la salida del país", relata.
Las amenazas a las que se ven sometidos son constantes y la vigilancia por parte de enviados del Gobierno cubano son habituales en la misión. Bajo la posición de "coordinadores" de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), al menos 50 cubanos que fueron contratados como médicos ejercen labores de control e información de las intenciones de su ministerio.
Estos "vigilantes", de acuerdo a esta misma fuente, reciben el doble de salario que los médicos, a pesar de estar contemplados en el mismo rango dentro del contrato. Esta es una más de las irregularidades de los contratos de Más Médicos de Brasil con Cuba y que salieron a la luz recientemente a través de grabaciones en las que se escucha cómo funcionarios cubanos establecen cómo se llevaría a la práctica este programa para poder percibir de manera encubierta la mayor parte del dinero.
Entre las irregularidades que se revelan están camuflar a los "asesores" contratándolos como doctores y estipular que el Gobierno cubano percibiría el 60% de lo que pagaría Brasil por cada médico.
Otra de las numerosas denuncias que se están produciendo desde Brasil la reproduce hoy la publicación OnCuba, que entrevistó otro de esos médicos presionados y que optó por el programa Más Médicos como un método de estabilizarse económicamente con su familia y satisfacer sus necesidades básicas. Como cuenta en este medio digital, "en Brasil, le permitían llevar a su familia durante el tiempo que durara el trabajo".
Este galeno, que no quiere identificarse para evitar represalias, cuenta que a cambio firmó un contrato de seis páginas con la Comercializadora de Servicios Médios Cubanos SA, perteneciente al Ministerio de Salud en el que se comprometía a ceder el 70% de su salario a las autoridades de la isla. Según contrato, percibiría 2.976 reales (unos $911) mensuales que se abonarían en una cuenta Brasil.
Según cuenta este doctor en OnCuba, su tranquilidad se rompió cuando recibió indicaciones del Ministerio de Salud Pública para que sus familiares retornaran a Cuba en un plazo máximo de dos meses o se tomarían medidas como la interrupción de su estadía en Brasil.
Los permisos de Cuba y Brasil no coinciden
El problema se debe a una falta de coordinación entre las autoridades de ambos países y la OPS, encargada de la gestión del programa Más Médicos. Mientras Brasil otorga a los médicos y sus familiares una visa de 36 meses para permanecer en su territorio, las leyes migratorias cubanas sólo permiten a sus residentes naturales estar dos años fuera de la nación sin perder la residencia en la isla. Aún así, Cuba no espera a que se cumpla ese plazo para reclamar que regresen, y en algunos casos les está exigiendo el regreso a los 30 días de haber viajado.
Tampoco existe una normativa clara en el contrato que firman acerca de la estancia de sus familiares en Brasil. Si bien no cita en ningún momento que puedan trasladarse a vivir con ellos, tampoco limita el tiempo que pueden visitarlos. Es un vacío legal redactado de esta menera en el documento:
"Comunicar a la Dirección de la Brigada Médica cubana en la República Federativa del Brasil, de forma previa, su intención de recibir la visita de algún familiar o amistad en la localidad donde presta sus servicios al amparo de este Contrato; en caso de producirse la visita, ésta será totalmente a su cargo y deberá tomar todas las medidas para que no se produzca afectación alguna al cumplimiento de sus deberes y obligaciones en correspondencia con el INSTRUMENTO JURÍDICO suscrito y con este contrato".
Es más, el Ministerio de Salud de Brasil establece que, desde el punto de vista legal, no hay nada que impida a las familias de los médicos permanecer en el país y en el artículo 18 de la ley de creación del programa Más Médicos prevé la llegada de familiares de los profesionales.
A esta circunstancia se une el hecho de que este país latinoamericano no sólo permite a los familiares la residencia, sino que muchos de ellos tienen permiso de trabajo y tienen desde hace meses una ocupación por la que perciben dinero. Deberían dejar no sólo a sus esposos e hijos, sino también abandonar su puesto y el dinero que perciben por él.