Excarcelan a manifestante de Cárdenas, víctima de brutalidad policial el 11J

Lázara Karenia González fue brutalmente detenida en Cárdenas, en la provincia de Matanzas, en las protestas del 11 de julio.

Una de las detenciones de los manifestantes del 11 de julio en Cuba denunciada más ampliamente por la brutalidad policial que implicó fue la de Lázara Karenia González Fernández. La joven apresada en Cárdenas, provincia de Matanzas, acaba de ser excarcelada, según divulga su familia en las redes sociales.

La joven de 28 años estuvo en prisión preventiva en el Centro Penitenciario para Mujeres BELLOTEX de Matanzas y fue acusada de los delitos de desórdenes públicos, desacato y atentado.

La manifestante recibió una sentencia de tres años de trabajo correccional sin internamiento.

“Primeramente, quiero darle gracias a Jehová (Dios) por jamás soltar nuestras manos en estos largos nueve meses. A todos nuestros amigos y familiares que, de una forma u otra, nos han apoyado en las redes y en la vida diario, hoy nuestra hermana está en casa. De parte de nuestra familia, gracias, gracias por tanto”, escribió en Facebook su hermana, Kirenia Wilhelm Benítez.


González Fernández fue la única mujer en el juicio celebrado en marzo contra 17 residentes de la ciudad de Cárdenas por su participación en las protestas populares del 11 de julio.

En el proceso, el tribunal municipal de esta ciudad ratificó todas las peticiones fiscales que van desde cinco hasta nueve años de privación de libertad por los presuntos delitos de “desacato”, “atentado” y “desordenes públicos”.

La oficial de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) Nayalis Correoso Mora, una de las que intervino en el arresto de la joven, actuó como testigo clave de la fiscalía y su testimonio estuvo cargado de falsedades y contradicciones, según denunció a Radio Televisión Martí una fuente presencial en el juicio.


“Lo que más impactó en la sala fue la oficial Nayalis, que fue quien detuvo a Lázara Karenia. Fue impresionante la cantidad de mentiras que esa mujer dijo en el tribunal, llegó un momento que todo el mundo en la sala comenzó a cuestionar hasta cuando esa mujer seguiría diciendo todas esas falsedades, decía una cosa y luego otra, toda una incoherencia, lo mismo decía que la detuvo en tal calle y después que había ocurrido en otro lugar. Todos nos dimos cuenta de la cantidad de testimonios falsos que estaba diciendo ella. Fue tan contradictorio que incluso la jueza del tribunal le recordó que ella debía conocer que estaba declarando bajo juramento, y que podría ser llevada a los tribunales y ser condenada a prisión por decir mentiras”, contó a Radio Televisión Martí Yuneisy Santana González, esposa de Samuel Pupo Martínez, de 47 años de edad y acusado de “desacato” y “desórdenes públicos”.