Ippei Mizuhara, ex intérprete del pelotero japonés Shonei Ohtani, estaría negociando con la fiscalía un acuerdo para declararse culpable de cargos federales por el supuesto robo de 4.5 millones de dólares.
Mizuhara está bajo una investigación que comenzó hace tres semanas, cuando salió a la luz un escándalo por la transferencia de fondos de las cuentas bancarias de Ohtani a una casa de apuestas ilegales en California.
El ex traductor, quien trabajó con la estrella japonesa desde que llegó a Grandes Ligas con los Angelinos de Los Angeles, fue despedido inmediatamente por los Dodgers, que lo contrataron como parte del pacto para firmar a Ohtani por diez años y 700 millones de dólares.
Fuentes cercanas a las pesquisas dijeron al periódico The New York Times que Mizuhara, quien aún no ha sido acusado formalmente, estaría adelantando la negociación de un acuerdo de culpabilidad.
Asimismo, la misma fuente aseguró que los investigadores policiales concluyeron que Ohtani fue víctima del robo y que las aseveraciones que hizo en un comunicado ante los medios, en el que negó cualquier implicación en las apuestas ilegales, eran precisas y se ajustaban a la realidad.
O sea, que la superestrella nipona, la cara actual de las Grandes Ligas, estaría exento de cualquier responsabilidad en las transferencias de fondos a la casa de apuestas ilegales operada por Matthew Boyer, quien estaba desde hace unos meses bajo investigación federal.
En la primera de dos entrevistas con ESPN, Mizuhara inicialmente dijo que había acumulado enormes deudas de juego y que Ohtani lo ayudó a saldarlas, con la promesa de no volver a apostar.
Pero casi de inmediato, el traductor cambió sus declaraciones y dijo que el pelotero no tenía conocimiento de los pagos.
Según el New York Times, Mizuhara cambió la configuración de la cuenta bancaria de Ohtani para que este no recibiera alertas o confirmaciones sobre transacciones.
Al margen de las pesquisas de las autoridades federales, la oficina del comisionado de Grandes Ligas inició su propia investigación, para determinar cualquier posible relación de Ohtani con las apuestas.