Apenas una semana después de iniciada la comercialización de los uniformes escolares para el próximo período lectivo en Cuba, se generan aglomeraciones en las tiendas designadas para tal efecto, en las que además reinan la escasez y el desorden.
La prensa oficial avisó que, como en años anteriores, se ofrecen uniformes a los grados en los que se cambia de ciclo: preescolar, quinto, séptimo y décimo, además del primer año de Enseñanza Técnico-Profesional y Pedagógico.
“El niño, al que le van a dar el uniforme, está anotado en una lista y tú llegas, con el carné de identidad, a una tienda en específico para cada municipio. Si estás en la lista, te lo venden”, explicó a Martí Noticias desde La Habana el periodista independiente Vladimir Turró, padre de tres estudiantes.
El hijo de nueve años de Turró, el del medio como su padre lo llama, comienza en septiembre el 5º. grado por lo que le corresponde un uniforme para dos cursos, el 5º. y el 6º.
“Una camisa y un short que tendrá que utilizar durante dos años, ¡a diario!, de lunes a viernes”, detalló Turró.
“Logré comprar uniformes, pero las tallas no son las de mi hijo que usa una 10 de camisa y la que había era 18 y el short, el niño usa una 14 y me vendieron una 10”, agregó.
Los empleados de la tienda determinada para la localidad de Arroyo Naranjo, aseguraron que no tienen otras tallas.
El resto de los grados dependerán del “arribo del tejido importado por la industria”, advirtió el Ministerio del Comercio Interior que también reconoció los “retrasos en la producción de bonos, por lo que las ventas serán controladas según listados emitidos por Educación”.
“A la hembra, la última vez que le dieron uniforme fue en 7º. grado. Estamos hablando de hace dos años. Además, en las escuelas exigen que los alumnos vayan de uniforme completo y a muchos, como en el caso de mis hijos, se les han ido quedando y no pueden abrocharse el botón de arriba del short porque han crecido”, señaló el comunicador.
Alternativas en el mercado negro
Sin embargo, en Revolico, la principal página web de comercio online en Cuba, aumenta la cantidad de personas que compran y venden uniformes escolares. Su precio varía entre 400 y 500 pesos el uniforme completo para la Primaria, 500 y 700 pesos cada pieza de Secundaria o el uniforme completo entre 1,000 y 1,500.
“En el mercado negro se pueden encontrar los uniformes, lo que a precios extremadamente altos. Puedes encontrar de todos los grados, en Revolico, en los grupos de Facebook, etc. y los padres, el que puede lo compra, porque no es fácil estar mandando a tu hijo una semana entera con un solo juego de uniforme. Hay que está lavando la camisa que, de hecho, es blanca”, recalcó Turró.
“No hay particulares que confeccionen uniformes. Eso lo hacen las fábricas textiles del régimen, donde están, evidentemente los revendedores”, dijo.
En el otro extremo del país, en Palma Soriano, Santiago de Cuba Leticia Pérez Loaenza, madre de tres niños en edad escolar, se desespera ante la inoperancia de los mecanismos del Estado para el inicio del curso.
“Ya estamos casi al comenzar las clases y todavía no hay, en ninguna de las tiendas, ni una sola pieza para vender. Entonces yo estoy realmente preocupada, pues no sé qué me hago yo con tres niños sin uniforme para comenzar el curso escolar. Es realmente indignante esta situación”.
El periódico Sierra Maestra notificó que en la provincia comenzó la venta de los uniformes a aquellos a quienes les corresponde. De acuerdo al medio estatal, los familiares de los educandos deben llamar a los centros educativos para ser informados.
“Lo único que han dicho es que les darán uniforme solo a los niños que comienzan el curso escolar en primer año, pero a las escuelas especiales en las otras escuelas no realizarán la distribución de los papeles de uniforme”, indicó Pérez Loaenza.
“En el Revolico Palma, los diferentes grupos de compra y venta, están todos los uniformes, pero tienen unos precios exuberantes, varían entre 500 y 1000 pesos cada pieza de uniforme. Tengo tres niños ¿cómo yo hago para poder pagar esa cantidad de dinero por un solo uniforme para cada uno de mis niños?
En Bayamo, Granma, Mileidis Espinosa, sostuvo que se alegra de tener un solo hijo, pero, aun así, sigue siendo problema porque: “! un solo uniforme para diez meses de curso!
Niurka Pardo Maceo, metodóloga del Departamento de Logística de la Dirección Provincial de Educación, declaró a la emisora Radio Bayamo que la comercialización se efectúa con los inventarios presentes en la red minorista, que no suplen la demanda de ningún nivel educativo, “pero esta es una realidad que debe transformarse con la entrega de los uniformes contratados con la industria”
Martí Noticias trató de entrevistar a la funcionaria para que ampliara sus declaraciones, pero se negó a hablar con nuestro medio.
Moisés Leonardo Rodríguez, un antiguo profesor de Física del Instituto Superior Pedagógico Enrique José Varona, residente en Mariel, Artemisa, considera que, como el resto de los servicios públicos, el de la enseñanza ha caído en picada con el acelerado deterioro de su infraestructura, el material de estudio y los suplementos e implementos escolares.
“Los servicios públicos que, en el caso de la dictadura cubana corren a cargo del Estado totalitario, tuvieron un momento en que las subvenciones del campo socialista los mantenían a un nivel determinado, pero desde que comenzó el periodo especial, la crisis que se mantiene hasta hoy y que se ha agudizado en los cinco últimos años; estos servicios han decaído en cantidad y calidad y un ejemplo es el de la Educación”, subrayó el pedagogo.