LA HABANA, Cuba.- Gorki Águila, director del grupo de rock Porno Para Ricardo, teme que tras su reciente arresto arbitrario, la Seguridad del Estado quiera atentar contra su estudio de grabación independiente.
“Los vi muy interesados en los trabajos que se hacen acá en La Paja Record”, denuncia el artista.
“Sobre todo en el programa Cambio de Bola que ahora tiene un matiz diferente y que no solo tiene el lenguaje y la dinámica radial sino que se le ha incluido imagen”, y cree que estas son las razones por las que fue secuestrado ayer en medio de la calle.
“En la mañana temprano salí a buscar, aquí mismo en el barrio, un cubito de arena para tapar los huequitos que me quedaron de un marco del estudio que tuve que cambiar porque me cogió comején”, y empieza narrando lo que puede ser una mañana cualquiera cuando “se me parqueó la mafia (policía), estilo Rápido y Furioso a detenerme”, cuenta.
“Como ya soy viejo en esta situación, saqué el celular y llamé a mi mujer para que supiera que me estaban arrestando”, y Vivian Cruz llamó a todo el que pudo para que se denunciara la detención arbitraria.
Al músico se lo llevaron para la estación de Zanja y Dragones, en Centro Habana, “bien lejos” del estudio que está situado en 33 y 42, en Playa.
Gorki denuncia una vez más que uno de los métodos de tortura de la policía castrista es mantenerlo dentro de la patrulla cerrada, parqueada bajo el sol, respirando su propio aire por la hermeticidad del espacio.
“Y lo que estaba pasando era que estaban esperando al seguroso para que él me hiciera la clásica puesta en escena de meterme en una habitación y amenazarme”, se dio cuenta luego de una hora y media de en esas condiciones.
“En el Cambio de Bola en que hemos incluido imagen, hemos tocado la inconstitución, la que ellos están cambiando, haciéndola más inconstitucional todavía”, y habla de su estilo habitual, “algo clásico que nosotros hacemos dentro de Porno Para Ricardo que es burlarnos de todos los burócratas”.
Los invitados “siempre somos los mismos, el Antonio, la Ailer, Claudio y yo que soy el anfitrión” y distingue lo que “siempre ha sido una jodedera, el chucho” del análisis serio sobre la actualidad, “y lo que está en la calle ahora es la inconstitución y el congreso de la UPEC”, comenta y se suma a los reclamos de otros artistas en contra del Decreto Ley 349.
“Este secuestro que me hicieron tiene mucho que ver con el decreto 349 porque nosotros encajamos perfectamente y de todas las maneras posibles”, analiza. “Nos metemos con todas las figuras a las que ellos llaman dirigentes de este país. Nos hemos metido haciendo canciones alegóricas directamente a ellos, empezando por Fidel Castro y creo que el secuaz de menos categoría debe ser la alimaña esta de Alpidio Alonso”, y habla de su última producción, Mickey The Grey. “Para que parezca algo grandilocuente, pero en español es Miguelito, el gris”, un texto dedicado a Díaz Canel.
Gorki está convencido de que el régimen debería de estarle agradecido porque “los estamos haciendo famosos, los estamos inmortalizando con una de nuestras canciones”, pero no acepta sugerencias de la Seguridad del Estado para “cambiar el repertorio de Porno Para Ricardo”, asegura.
Según el director del grupo “el único momento simpático de la situación fue cuando el tipo dijo: esa porquería que ustedes hablan ahí en el programa, y yo le respondí: ¿tú sabes?, qué casualidad nosotros también pensamos que ustedes hablan porquería en sus programas, y se rió.”
Y aunque parece relajado “es muy penoso tener contacto de primera clase, un encuentro cercano con estos descarados que lo único que están haciendo es cortándote tu libertad más elemental de derechos humanos: el derecho a expresarme artísticamente”.
“Para los arrestos que yo he tenido estuve bastante poco tiempo. Parece que la solidaridad cada día funciona más rápido”, pero no pierde de vista que fue amenazado con su hija, con la familia y que “ellos son capaces de matar”, y pone de ejemplo a Nicaragua.
“Nada más tienes que ver todo lo que está pasando allí, matan a los jóvenes y les echan la culpa a los manifestantes. Ese es el plan que ellos tienen para Cuba, si alguna vez el pueblo se tira para la calle”, porque calcula que la pérdida de los represores no solo sería monetaria sino que “serían juzgados como los criminales y es que en este país un día va a haber libertad porque Nothing is Forever”, concluye.
(Publicado originalmente en CubaNet)