El peso argentino se desplomó el lunes después de que un candidato antisistema de 52 años que admira al ex presidente estadounidense Donald Trump quedó primero en las elecciones primarias que ayudarán a determinar al próximo presidente del país.
Javier Milei sacudió el estamento político de Argentina el domingo al recibir la mayor proporción de votos primarios para candidatos presidenciales en las elecciones generales de octubre, para determinar quién liderará una nación golpeada por problemas económicos.
Milei quiere sustituir el peso por el dólar, dice que el Banco Central de Argentina debe ser abolido y que cree que el cambio climático es una mentira. Ha calificado la educación sexual como una estratagema para destruir la familia, y ha dicho que cree que la venta de órganos humanos debería ser legal. También ha dicho que debería ser más fácil para los argentinos poseer armas de fuego.
El gobierno argentino decidió devaluar la moneda local un 20% a primera hora de la mañana del lunes, tras los sorprendentes resultados que convirtieron a Argentina en el último país en el que los votantes han elegido a un candidato de fuera para expresar su enfado contra el statu quo. Dos coaliciones políticas mayoritarias se han repartido el poder durante una década en Argentina.
Los operadores observaban nerviosos el lunes cómo el valor del peso también disminuía en el mercado paralelo, o azul, cayendo un 12% a primera hora de la tarde.
Argentina exige que los ciudadanos voten, y el 69% de los 35 millones de votantes del país acudieron a las urnas, cada uno de los cuales eligió candidatos para cargos que van desde concejal local a presidente.
Los principales partidos se disputaron la candidatura presidencial. Millei no tuvo oposición, y obtuvo algunos puntos más que los candidatos de los partidos que han dominado la política argentina.
Tras obtener unos resultados mucho mejores de lo esperado, el advenedizo candidato de largas patillas y pelo desgreñado, que ganó notoriedad y seguidores como una estrella del rock despotricando airadamente contra la "casta política", es ahora un verdadero aspirante a la presidencia.
Según los resultados oficiales, Milei obtuvo alrededor del 30% de los votos en el 97% de los colegios electorales. Los candidatos de la principal coalición opositora, Unidos por el Cambio, se situaban en el 28% y la actual coalición gobernante, Unión por la Patria, tenía el 27%.
Para ganar la votación dentro de dos meses, Milei tendría que aumentar su porcentaje de votos nacionales en un 15%, un obstáculo importante incluso en una nación donde los votantes tienden a favorecer a los candidatos que ven como ganadores.
Si un candidato no obtiene el 45% de los votos, necesitaría el 40% y una ventaja de 10 puntos sobre el segundo clasificado. De lo contrario, la carrera iría a una segunda vuelta en noviembre entre los dos primeros.
Celebrando en su sede electoral, Milei prometió poner "fin a la casta política parasitaria, corrupta e inútil que existe en este país".
"Hoy dimos el primer paso hacia la reconstrucción de la Argentina", dijo. "Una Argentina distinta es imposible con los mismos de siempre".
Milei es legislador en la cámara baja del Congreso argentino desde 2021.
Argentina está luchando con una inflación anual superior al 100%, el aumento de la pobreza y una moneda que se deprecia rápidamente, y Milei atrajo por primera vez un apoyo más amplio al pedir que el país reemplace el peso por el dólar estadounidense.
"Estoy muy contento, buscamos un cambio. Estamos cansados de vivir así", dijo Franco Lesertessur, de 19 años, mientras celebraba frente a la sede electoral de Milei en el centro de Buenos Aires. "Todos los países que se dolarizaron terminaron avanzando y dejaron de tener inflación".
La principal coalición opositora, Unidos por el Cambio, se desplazó más a la derecha, ya que la ex ministra de Seguridad Patricia Bullrich, que hizo de la mano dura contra el crimen un eje de su campaña, venció con holgura a un contendiente más centrista.
En la coalición actualmente gobernante, Unión por la Patria, el candidato más favorable a las empresas, el Ministro de Economía Sergio Massa, se impuso fácilmente a un aspirante de izquierdas, pero aún así recibió una paliza general de los votantes frustrados por la mala situación de la economía, quedando en tercer lugar en el total de votos.
En la sede electoral de Milei, los líderes del partido se mostraban extasiados mientras la gente lo celebraba fuera, expresando su optimismo de que el apoyo a su candidato no hiciera sino crecer de cara a octubre.
"Me gustan sus ideas sobre la libertad. Sus ideas no me asustan. La gente es libre de elegir lo que quiera", dijo Orlando Sánchez, de 26 años, trabajador del comercio minorista. "Si los delincuentes van por ahí con armas en el cinturón, ¿por qué un ciudadano de a pie no puede tener una legalmente y con la documentación adecuada? Está claro que la gente está cansada de la política, de que le mientan constantemente".