"El jefe de la prisión le dijo que le iba a sacar los dientes a palos"

El preso político del 11J Leonel Tristá García.

Manifestantes del 11 de julio de 2021, encarcelados en la prisión Alambradas de Manacas, en la provincia de Villa Clara, anunciaron que este martes iniciaron una huelga de hambre en protestas por los maltratos físicos y las precarias condiciones a las que están sometidos en ese penal.

En llamada telefónica desde esa prisión Liván Hernández Sosa y Carlos Michael Morales, dijeron al Consejo de Relatores de Derechos Humanos de Cuba, que seguirán plantados demandando la presencia de la Fiscalía Militar de la Región Central, para que investigue todo lo que allí ocurre.

La acción también busca solidarizarse con Leonel Tristá García, quien el pasado jueves, luego de reclamar mejor alimentación, medicamentos y condiciones en general, fue agredido por el director de la prisión, el Teniente Coronel Cadil Fernández Cabrera, que lo encerró en celda de castigo.

Tristá García, de 38 años, es hipertenso, entre otros padecimientos, y ha realizado más de una huelga en las diferentes cárceles de la provincia por donde ha transitado, solicitando una revisión de su condena de 8 años de cárcel por participar en las protestas en la ciudad de Santa Clara.

“Leonel Tristá lleva días plantado porque el jefe de la prisión le dijo que le iba a sacar los dientes a palos. Eso pasó el jueves, después que nosotros habíamos llamado por teléfono, y lo tienen en una celda oscura, sin agua, sin baño, sin nada, tirado allí, y él dijo que hasta que no venga un Fiscal Militar, no se desplanta. Entonces, yo y Carlos Michael vamos a estar plantados hasta que resuelvan el problema de él, lo que andan buscando es un motivo para levantarle causa. Hasta el martes que viene, que yo mandaré a alguien, porque ya a mí me deben sacar también de circulación, me deben llevar para celda también”, explicó Hernández Sosa, condenado a 4 años de privación de libertad por los delitos de desórdenes públicos y desacato, por participar en las protestas de Santa Clara.

Lee también Presos políticos en cárceles de Cuba denuncian pésima alimentación


“Ya empecé hoy ya, ahora cuando yo cuelgue el teléfono ya voy a reportarme y me deben llevar para celda, tengo la úlcera, gastritis, problemas en la vesícula, cálculos en los riñones, hipotensión arterial, pero la voy a hacer, porque el problema es que hay una represión muy grande en contra de nosotros tres. También vamos a exigir que venga la Fiscalía Militar para una serie de irregularidades que se cometen aquí en el penal con nosotros, la represión de ellos con nosotros es grande, contra nosotros tres, nos están amenazando constantemente con sacarnos los dientes, con darnos golpes, y eso es una cosa que no podemos permitir”, advirtió.

Your browser doesn’t support HTML5

Presos del 11J exigen hablar con Fiscalía Militar para denunciar abusos en prisión



Los tres condenados por participar en las protestas del 11J han sufrido múltiples castigos desde que están presos por reclamar derechos y mejores condiciones para los reos.

Carlos Michael, de 47 años, quien cumple 2 años y 10 meses de condena por participar en la manifestación en el poblado de Caibarién, ha denunciado en varias oportunidades que la alimentación en Alambradas de Manacas es pésima, que está enfermo y sin medicamentos y lo están amenazando con imponerle una nueva causa con el propósito de mantenerlo en prisión.

Preso político del 11J Carlos Michael Morales Rodríguez, autor del blog “Amantes de la Libertad”

El preso político fue maltratado recientemente por el segundo jefe de orden interior de esa prisión, que lo amenazó con nuevos castigos de continuar con su postura en contra de la revolución.

Hace unos días, el también periodista independiente denunció que un oficial lo tiró contra una pared. Semanas antes alertó que fue torturado por ese mismo guardia, quien lo esposó a las rejas durante 12 horas en un pasillo.


Hernández Sosa ha sido enviado en más de una oportunidad para celdas de castigo por realizar protestas en reclamo de medicamentos, atención médica y mejores condiciones carcelarias.