El Departamento del Tesoro de Estados Unidos sancionó este jueves a la agencia de contrainteligencia de Venezuela tras la muerte en prisión del capitán de la Armada Rafael Acosta Arévalo, detenido por su presunta participación en un complot para asesinar al presidente en disputa Nicolás Maduro.
La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) designó a la Dirección General de Contrainteligencia Militar del Gobierno de Venezuela, más conocida como DGCIM.
“Como resultado de la acción de hoy, todos los bienes e intereses en la propiedad de esta entidad, y de cualquier entidad que sea propiedad, directa o indirectamente, del 50 por ciento o más de esta entidad, que se encuentren en Estados Unidos o en posesión o control de personas estadounidenses están bloqueadas y deben ser reportadas a la OFAC”, señala un comunicado del Departamento del Tesoro.
"El arresto por motivos políticos y la muerte trágica del capitán Rafael Acosta fue injustificada e inaceptable", dijo el secretario del Tesoro Steven Mnuchin.
"El Departamento del Tesoro se ha comprometido a poner fin al trato inhumano del antiguo régimen de Maduro contra los opositores políticos, los civiles inocentes y los miembros de las fuerzas armadas en un esfuerzo por eliminar la disidencia", agregó.
Cuando Acosta fue visto por primera vez públicamente en su audiencia, siete días después del arresto, mostró signos de abuso físico, tuvo que ser conducido en una silla de ruedas y no pudo hablar. El 29 de junio, el capitán murió. “Aunque dos funcionarios de la DGMCC fueron acusados de homicidio en relación con la muerte de Acosta, esta es solo la muestra más reciente de brutalidad llevada a cabo por una agencia notoria por sus métodos violentos”, subrayó el Tesoro.