Estados Unidos aseguró este miércoles que no tiene planes para cambiar la política migratoria hacia Cuba. El anuncio se emite después que el representante republicano por Arizona, Paul Gosar, distribuyó esta semana en el Capitolio el borrador de un proyecto de ley para eliminar la Ley de Ajuste Cubano de 1966, que le permite a los cubanos solicitar su residencia permanente un año y un día después de haber llegado a territorio estadounidense.
"Gosar ha tratado de lograr apoyo para su proyecto, pero ha encontrado resistencia por parte de legisladores que no son partidarios de eliminar la legislación pero sí partidarios de modificarla para evitar abusos", informó desde Washington Alberto Muñoz, corresponsal de Radio Martí en la capital de Estados Unidos.
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Detalles con Luis Alberto Muñoz, desde Washington
Por su parte la congresista Ileana Ros-Lehtinen, republicana por la Florida, afirmó este martes que "no debe de haber tráfico entre Cuba y los Estados Unidos para quienes escogen usar la Ley de Ajuste Cubano para obtener la residencia Americana".
"Recientemente he visto cómo algunos ciudadanos cubanos han tomado ventaja de la Ley de Ajuste Cubano para viajar a Cuba después de sólo un año de residencia en los Estados Unidos", dijo la congresista quien recordó que esa ley "fue creada para proteger a quienes vienen a nuestra gran nación porque, de lo contrario, serían perseguidos en su tierra natal".
Ros-Lehtinen divulgó un comunicado a través de su oficina de prensa en el cual afirma que desde un principio ha estado en contra de la política pies secos / pies mojados.
"No podemos confrontar esta epidemia apropiadamente sin primero resolver la verdadera causa del problema, la dictadura comunista de los Castro", afirmó la congresista y destacó que "el creciente número de cubanos que arriesgan sus vidas para cruzar el estrecho de la Florida para obtener libertad es un crudo recordatorio de la brutalidad del régimen castrista que le niega al pueblo cubano sus libertades fundamentales".
El lunes, la tripulación de la Guardia Costera del navío William Trump repatrió a 50 cubanos a Bahía de Cabañas, en Cuba, resultado de cinco interceptaciones en el mar en el estrecho marítimo del sur de la Florida. En todos los casos se trata de cubanos que intentaban entrar ilegalmente a Estados Unidos en embarcaciones rústicas o balsas.
"Las misiones de la Guardia Costera y las operaciones en el sureste se mantienen sin cambios, de acuerdo a las políticas de inmigración de Estados Unidos. La Guardia Costera desalienta fuertemente los intentos de entrar ilegalmente al país por vía marítima", dijo el capitán Mark Gordon, jefe de la Guardia Costera del séptimo distrito.
La ley, "que privilegia a los cubanos bajo el argumento de que escapan de la represión del régimen comunista y ha sido mantenida por nueve Administraciones y el Congreso, está siendo seriamente cuestionada desde que el pasado mes de diciembre el presidente Obama, anunció que restablecería las relaciones diplomáticas con Cuba", informaron medios de prensa.