EEUU asegura que sus diplomáticos mantendrán contactos con activistas cubanos

Un guardia de seguridad vigila la entrada a la Embajada de EEUU en La Habana.

El gobierno de Estados Unidos reafirmó este martes que mantendrá sus contactos habituales con los activistas de derechos humanos en Cuba, luego que funcionaros del régimen de La Habana acusaran a diplomáticos estadounidenses de interferencia en los asuntos internos.

“Hacerlo no solo es aceptable, es imperativo”, dijo a este reportero un portavoz del Departamento de Estado.

Mencionó además, el hecho de que los diplomáticos de Cuba en EEUU se reúnen habitualmente con sus contactos: “Es una práctica diplomática normal reconocida en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas que los funcionarios consulares se reúnan con una variedad de contactos en la sociedad”.

El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez, acusó este lunes al Gobierno del presidente Donald Trump de estar "involucrado directamente en el financiamiento y orientación para que en Cuba se cometan acciones de desobediencia civil y actos ilegales contra el orden público".

También Carlos Fernández de Cossío, director del Buró de Estados Unidos del Minrex, llamó a consulta el pasado sábado al Encargado de Negocios de Estados Unidos, Timothy Zúñiga-Brown, por su apoyo al Movimiento San Isidro.

Durante una comparecencia realizada en la emisión estelar del Noticiero Nacional de Televisión, Fernández de Cossío repitió las acusaciones contra el diplomático estadounidense y mostró imágenes de la presencia y actividad del Encargado de Negocios en el barrio de San Isidro.

En este sentido el portavoz del Departamento de Estado fijó la postura del gobierno estadounidense hacia los activistas.

“Condenamos enérgicamente el hostigamiento del régimen cubano a activistas que protestan pacíficamente por el encarcelamiento del defensor de derechos humanos Denis Solís González, miembro del Movimiento San Isidro (MSI)”.

El vocero del Departamento de Estado señaló que la semana pasada el régimen hizo promesas a los manifestantes pacíficos, prometió escuchar a su pueblo y entablar un diálogo, así como promesas de una mayor libertad de reunión.

“El régimen ha roto esas promesas. Debe explicar no solo por qué niega a los cubanos sus derechos inalienables, sino que ni siquiera les permite lo que él mismo acordó hace una semana”, dijo el portavoz.