El prisionero político cubano Virgilio Mantilla Arango estuvo 19 días en una celda aislamiento, tras haber denunciado las precarias condiciones carcelarias del penal de máxima seguridad de Kilo 7, en la provincia de Camagüey.
"Muy mal que salí. Esa frialdad allí acabó conmigo, tengo muchos dolores en los pulmones porque la celda acabó conmigo, esa frialdad, es un 1 metro de ancho y 31/2 de largo. Querían dejarme ahí tres meses y yo les dije 'yo no represento ningún peligro para los presos ni para los guardias, yo no soy un animal, yo no he cometido ningún delito, yo lo único que estoy haciendo es acusando al jefe de la unidad", dijo el opositor en llamada telefónica con Jiordan Marrero Huerta, presidente del Partido Demócrata Cristiano de Cuba.
Las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos (Reglas Nelson Mandela) disponen que las restricciones o sanciones disciplinarias no podrán, en ninguna circunstancia, equivaler a tortura u otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes, y prohiben el aislamiento indefinido; el aislamiento prolongado; el encierro en una celda oscura o permanentemente iluminada; las penas corporales o la reducción de los alimentos o del agua potable y los castigos colectivos.
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"Yo se lo dije al de la Seguridad del Estado 'yo no pensé que ustedes eran tan criminales así. El comunismo les hace enfurecer y envenenar el corazón contra su propio pueblo' y parece que entendieron y me sacaron de la celda, pero de verdad que sí estoy muy mal", agregó el preso político de 54 años, condenado a tres años y tres meses de privación de libertad en 2021 por el delito de daños a la propiedad, tras escribir en la fachada de una casa en el reparto La Caridad la frase "Comunismo No, Martí Sí".
La protesta junto a los reos del destacamento número 9 por las precarias condiciones a las que están sometidos y la escasez de alimentos y medicinas, le costará a Mantilla Arango un nuevo juicio por desacato por el que pudiera ser sancionado a otro año de cárcel.
"Me dijeron que dentro de 20 días me iban a hacer el juicio", indicó el opositor que asegura que se trata de un "falso proceso".
"Yo les dije que mi familia tenía que estar ahí, que les avisaran porque ellos tienen que oír mi declaración y la acusación", dijo el fundador de la Unidad Camagüeyana por los Derechos Humanos.
Se trata de la cuarta causa que enfrenta el opositor.
En noviembre de 2023, representantes del régimen de La Habana afirmaron ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas que en los últimos cinco años, se había sancionado a "144 funcionarios de prisiones por extralimitarse en el ejercicio de sus funciones".
Además dijeron que "la mejora del sistema penitenciario cubano seguía siendo una prioridad y que se habían adoptado numerosas medidas para garantizar unas condiciones de vida dignas, de conformidad con las normas internacionales".
En el más reciente informe del Grupo de Trabajo sobre el Examen Periódico Universal de Cuba consta que la delegación cubana aseguró que sus propias autoridades habían realizado 6.400 inspecciones de centros penitenciarios.
[Con reporte radial de Tomás Cardoso]