La Dra. Noeima Rodríguez, residente en Jiguaní, Granma, fue citada el viernes por la Fiscalía Militar e interrogada por la Seguridad del Estado.
La señora fue amenazada por su postura crítica contra el sistema comunista en Cuba, expresada en sus redes sociales y su pertenencia al Gremio Médico Cubano Libre, una de las organizaciones más críticas al abordar el colapso de la salud pública en Cuba y el manejo de la pandemia por parte de las autoridades sanitarias en la isla.
Las intimidaciones incluyeron, según relató este sábado en conversación con ADNCuba, el encarcelamiento, la custodia de sus hijos y la prohibición de entrada al país a sus familiares que viven en el exterior.
“Me quisieron intimidar usando a mis hijos", declaró.
“Es increíble la cantidad de información que ellos tienen. Ellos usaron audios, me mostraron chats, me sacaron, una a una, cada una de mis publicaciones de Facebook y me hicieron un debate con cada una de ellas", comentó asombrada la especialista en Cirugía Maxilofacial.
En un inicio la Fiscalía Militar la citó como testigo por una denuncia de un ataque a piedras a una tiendas de MLC del municipio de Jiguaní, explicó.
"Fue citada para el organismo de instrucción penal del G2 donde nos tuvieron casi 2 horas. A ella la interrogaron por su conducta en las redes y su manifestación en contra de la dictadura", había informado antes, desde sus redes sociales, el doctor Alexander Jesús Figueredo Izaguirre, quien la acompañó en esas difíciles circunstancias.
“Somos profesionales de la salud, no somos delincuentes ni mercenarios pagados por el imperio, acaben de meterse eso en la cabeza, que pensemos diferente y queramos libertad denunciando a los dictadores, no significa que seamos inhumanos ni desafectos de la sociedad, con los batas blancas es por gusto. Esto es Patria y Vida, no hay marcha atrás”, concluyó el especialista de primer grado en Medicina General e Integral en Bayamo, Granma, quien fue expulsado de su trabajo en un policlínico de esa ciudad por su oposición al régimen.
Desde el mes de mayo Figueredo Izaguirre denunció que la doctora Rodríguez, de Granma, y sus colegas el Dr. Alexander Pupo, Yoan Pérez Leyva, de Las Tunas y Manuel Guerra, de Holguín "se han visto coaccionados, intimidados, reprimidos, por decir la verdad".
Por su parte, el abogado independiente Sergio Osmín Fernández Palacios explicó: "la joven galena forma parte de millones de cubanos que tenemos nuestra inamovible convicción,- que no es un ilícito penal -, en cuanto a entender y expresar lo que está mal en sentido general y en detrimento, en especial, de las Libertades Fundamentales del ser humano, cuyo respeto, sin coartaciones y represiones por parte de las autoridades cubanas es de cardinal importancia para la armonía y la prosperidad de una nación más allá de las diferencias o motivaciones políticas o ideológicas de cada quien".