El veterano disidente y activista por la democracia Guo Min llegó a Estados Unidos tras huir de China a través del sudeste asiático, después de años de haber sido blanco de las autoridades por conmemorar la masacre de Tiananmén de 1989 y participar en otras formas de activismo pacífico.
Guo, de 62 años, un expolicía convertido en activista político de la provincia central de Hunan, huyó del país desde la región suroccidental de Guangxi el 1 de agosto, cruzando la frontera hacia el vecino Vietnam y viajando a través de Laos y Tailandia, dijo a Radio Asia Libre, RFA.
"Llegué a la frontera en Guangxi el 31 de julio", dijo después de arribar a Estados Unidos, donde planea solicitar asilo político. "Las autoridades me habían impuesto una prohibición de viajar, así que solo podía salir huyendo a Vietnam".
"Me quedé en Vietnam durante cuatro días y luego huí a Laos. Llegamos a Bangkok tres días después, luego fuimos a Dubái y después a Los Ángeles", precisó Guo, quien ingresó al país con una visa válida.
Guo dijo que se fue para reunirse con su familia en Estados Unidos después de años de acoso, vigilancia y arresto domiciliario vinculados a su activismo a favor de la democracia y su conmemoración pública de la masacre del 4 de junio de 1989 por parte de las tropas del Ejército Popular de Liberación de China que puso fin a semanas de protestas por la democracia lideradas por estudiantes en la Plaza Tiananmén de Beijing y en otras ciudades importantes.
Fue uno de los ocho activistas detenidos el 3 de junio de 2017 por publicar en redes sociales una foto de ellos mismos con motivo del aniversario de la masacre.
A principios de este año, la policía de la Seguridad del Estado lo llevó a un viaje forzado fuera de la ciudad antes del aniversario del 4 de junio, y se vio obligado a compartir su ubicación con la policía durante reuniones y aniversarios políticamente delicados.
"Me pusieron bajo arresto domiciliario varias veces, a veces en un hotel, durante uno o dos días a la vez", dijo Guo, quien ha hecho varios intentos de salir del país legalmente.
"En octubre de 2019 fui detenido por la policía fronteriza cuando intentaba salir del país a través del aeropuerto Baiyun de Guangzhou", dijo. "Dijeron que era sospechoso de incitación a subvertir la seguridad nacional y que no se me permitía irme".
"Lo ven como una figura clave"
Guo, de 62 años, fue uno de los muchos ciudadanos chinos a los que se les revocó el pasaporte en el apogeo de la política de cero COVID en 2020, y solo logró obtener uno nuevo después de su segunda solicitud a principios de este año.
Sin embargo, el simple hecho de tener un pasaporte no era suficiente.
"Fui detenido por una inspección fronteriza en el puerto de Gongbei en [la ciudad sureña de] Zhuhai en marzo", dijo Guo.
Mientras tanto, las autoridades quieren que regrese a casa.
El disidente de Zhuzhou, Cheng Xiaofeng, dijo que la Seguridad del Estado sigue pidiéndole que se comunique con Guo y lo haga regresar a China.
"Lo ven como una figura clave, así que tengo que tratar de que regrese todos los días", dijo Cheng, y agregó que los activistas que se quedaron en Zhuzhou han sido interrogados sobre la partida de Guo. "Ahora están furiosos e intentan todo lo posible para recuperarlo".
"Me acosan todos los días porque saben que tengo una buena relación con Guo Min".
Zhu menos afortunado
Mientras tanto, el también activista por la democracia Zhu Yufu fue capturado mientras intentaba hacer el mismo viaje a través de Guangxi. Fue puesto bajo arresto domiciliario en la provincia oriental de Zhejiang, dijo a RFA en una entrevista reciente.
"De repente, un auto se acercó por detrás y cruzó frente a nuestro auto", dijo Zhu sobre su detención en Guangxi, a un kilómetro de la frontera con Vietnam. "Cuatro o cinco personas vestidas de civil se bajaron del coche y corrieron, esposando al conductor de nuestro coche".
"Usaron bridas para cables como restricciones para el resto de nosotros, luego me preguntaron mi nombre, de dónde soy", dijo. "Otro tipo se acercó y me preguntó si tenía antecedentes penales, y le dije que sí, subversión del poder del Estado, y me dijo 'tú eres el tipo que estoy buscando'".
Zhu, que había estado tratando de eludir una prohibición de viajar para visitar a su hermana enferma en Japón, dijo que no veía cómo podía ser acusado de cruzar ilegalmente una frontera cuando todavía estaba a un kilómetro de distancia.
"Ahora me acusan de cruzar ilegalmente la frontera como una forma de controlarme", dijo.
Zhu, que anteriormente cumplió una condena de siete años de cárcel por "subversión del poder del Estado" por escribir un poema inspirado en la Primavera Árabe, sufre actualmente de una enfermedad cardíaca y presión arterial alta.
Su hermana Zhu Yanmin, que vive en Kyushu, tiene un cáncer de pulmón avanzado que se considera terminal.
(Traducido al inglés por Luisetta Mudie y al español por Martí Noticias)