La Patrulla Fronteriza de Estados Unidos respondió el viernes al desembarco de 29 inmigrantes cubanos en los Cayos de Florida.
Las autoridades dijeron que se realizó una búsqueda exhaustiva. La precaria embarcación en que viajaban llevaba escrita la frase "Cristo Vive" y el nombre "Sebastián".
Los agentes de la Patrulla Fronteriza respondieron el jueves a otro desembarco, que tuvo lugar en el Parque Nacional Dry Tortugas, en la Florida, donde detuvieron a 30 migrantes cubanos.
El jefe del Sector de Miami de la Patrulla Fronteriza, Walter Slosar, dijo en Twitter que el grupo estaba integrado por 19 adultos y 11 menores.
Llegaron en un pequeño bote con el rótulo "Vida".
En varias oportunidades, Estados Unidos ha reiterado que llegar a territorio estadounidense por mar puede hacer que las personas no sean elegibles para emigrar bajo el nuevo parole humanitario. La medida, en vigor desde el 6 de enero pasado, beneficia a cubanos, haitianos, nicaragüenses y venezolanos con dos años de estancia legal en EEUU y permiso para trabajar.
De la misma manera, la Guardia Costera de Estados Unidos, USCG, informó a través de Twitter que el jueves fue repatriados a Cuba un grupo de 16 balseros que fueron detenidos frente a Isla Morada en la costa de la Florida.
De acuerdo a la información suministrada por las autoridades estadounidenses, en su breve comunicado, estos cubanos fueron devueltos a la Isla por la tripulación del escampavía Kathleen Moore.
Desde el 1 de octubre, en que comenzó el presente año fiscal, las autoridades estadounidenses han interceptado a 5.528 cubanos, una cifra que crece por día, mientras que, en el año fiscal pasado fueron interceptados 6.182 balseros, según reportes de la USCG.
La Guardia Costera estadounidense, que patrulla las aguas del Caribe en labores de rescate y salvamento, ha alertado en varias ocasiones sobre los peligros de la emigración ilegal por vía marítima, e instado a los migrantes a buscar vías legales, que no pongan en riesgo sus vidas y las de sus familiares.