El ministro de Comunicaciones de Trinidad y Tobago, Stuart Young, dijo que podría haber conversaciones con el gobierno de Cuba para abordar la deportación y repatriación de los cubanos que fueron detenidos el pasado viernes por protestar ilegalmente frente a la oficina de la ONU en Puerto España, la capital.
En declaraciones hechas a la prensa el pasado viernes, Young dijo que "en alguna etapa, vamos a conversar a través del Ministerio de Seguridad Nacional con el embajador cubano en Trinidad y Tobago para averiguar qué podemos hacer sobre la repatriación y deportación de estos individuos".
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"Ya he hablado con la oficina de la ONU para los Refugiados y la ONG Living Waters, la Policía e Inmigración. Acerca de los ciudadanos cubanos, el próximo paso será hablar con el gobierno cubano y averiguar qué está pasando", dijo Young.
El ministro reiteró que Trinidad y Tobago no tiene una legislación nacional para abordar estas situaciones y se refirió al papel que juega la ONU. "Por lo que he visto en un informe, hasta la ONU en Trinidad y Tobago es incapaz. Son ellos quienes están desarrollando un proceso. Han sido incapaces de desarrollar un proceso para procesar a estas personas rápidamente".
"Mi entendimiento del estatus de refugiado es que si son reconocidos por la ONU, la ONU los puede reasentar en otras naciones. Ellos tienen tratados y acuerdos para que ellos inicien nuevas vidas allá. Trinidad es como un país puente. Pero todo debe llevarse a cabo conforme a nuestras leyes," explicó Young.
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Entretanto, el grupo de 78 cubanos detenidos el viernes pasado fueron llevados al Centro de Detención de Inmigración en la localidad de Aripo.
El diario local Guardian informó que cada uno fue ofrecido el viernes en la noche una fianza de cinco mil dólares trinitarios, pero ninguno tuvo la oportunidad de aprovechar ese recurso.
Guardian reporta que cada uno de los cubanos fue acusado bajo la sección 64 de la Ley de Ofensas, por haber obstruido espacios públicos en la calle Chancery Lane. La multa es de 200 dólares trinitarios y hasta un mes de cárcel. Todos se declararon no culpables.
El abogado del grupo, Wendell Louis, subrayó que todos los cubanos detenidos están huyendo de la opresión y persecución política, y que van a apelar el caso.
En septiembre pasado, un tribunal de Trinidad y Tobago desestimó cargos similares presentados a ocho cubanos, porque la policía no estaba preparada para el caso. Algunos de esos ocho están en el actual grupo, o sea detenidos en el Centro de Aripo.
(Guardian y conferencia de prensa del gobierno de Trinidad y Tobago)