El Departamento de Estado expresó en un comunicado que “Estados Unidos está profundamente preocupado por los informes de que el Líder de la Mayoría en la Asamblea Nacional (de Venezuela), Julio Borges, y otros diputados de la oposición, fueron rechazados por la policía al tratar de acceder al Consejo Nacional Electoral, y luego, mientras regresaban a sus oficinas, fueron atacados por un grupo de partidarios armados del (gobernante) Partido Socialista Unido de Venezuela, mientras que el Partido Socialista Unido de Venezuela”
La nota de la cancillería estadounidense precisa que “Estados Unidos condena los actos de violencia destinados a intimidar a ciudadanos que ejercen sus derechos democráticos. Llamamos a las fuerzas de seguridad del gobierno de Venezuela a mantener el orden de manera compatible con el derecho internacional y los compromisos internacionales en materia de derechos humanos y civiles”.
Borges, presidente de la bancada opositora en la Asamblea legislativa, fue atacado el jueves por militantes oficialistas luego que militares y policías impidieron a un grupo de diputados ingresar al órgano electoral para exigir la activación de un referendo revocatorio contra el presisdente Nicolás Maduro.
Borges recibió puñetazos y patadas y fue golpeado con un tubo metálico, lo que le provocó un sangramiento nasal.