El preso político Yasmany Luis Solano denunció que fue humillado y sometido a un trato degradante por dos miembros del personal penitenciario de la prisión Canaleta de Ciego de Ávila, donde fue recluido tras participar en las protestas del 11 de julio en la capital avileña.
En una llamada telefónica a su esposa Rujaine Cárdenas Gómez, Solano afirmó que el hecho ocurrió el pasado 26 de julio cuando se encontraba en las afueras del comedor esperando su turno para entrar.
“Mi marido Yasmany Luis Solano se encontraba sentado, con todos sus compañeros, esperando que dieran el almuerzo. Viene un guardia llamado Adonis, y le dice, en muy mala forma, que se tranque, es decir, que entre para el pabellón donde se aloja todo el destacamento”, relató la mujer.
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“Yasmany le pregunta por qué lo trata en mala forma. El guardia le responde que él habla como le da la gana, que se tranque. Pero acto seguido, le indica que lo va a meter en la celda de castigo por diez días, le pone las esposas bien apretadas y lo empuja hacia la ‘solitaria’, espetándole frases ofensivas como ‘penco y descarado’”, señaló Cárdenas Gómez.
“Otro guardia nombrado Alberto Martínez, se incorpora al abuso. Entonces Yasmany se desespera y sale corriendo y choca contra la reja, se parte la frente y se golpea en la rodilla. Sangrando se lo llevan a la oficina del jefe de la prisión, quien, conciliador, cuestiona a Yasmany por qué los presos del 11 de julio son tan ‘excéntricos’”.
“Le suspende el castigo y lo manda de vuelta al destacamento, pero la afrenta que sufrió mi marido delante de todos los presos quedó sin escarmiento, no se adoptó ninguna medida disciplinaria contra ellos”, lamentó la esposa.
Cada año, cientos de denuncias de agresiones y malos tratos salen de las prisiones cubanas a los medios de prensa independientes, pocas llegan a los órganos de cárceles y prisiones porque los reos tienen poca fe en que los culpables sean castigados o temen a represalias mayores de sus carceleros.
“Otros reclusos que durante el incidente trataron de interceder por Yasmany, me llamaron luego y me aseguraron que ese guardia, Adonis, le tiene inquina personal a mi esposo y a todos los de las protestas del 11J. Los castigan con más frecuencia, los insultan”, señaló Cárdenas.
Yasmany Luis Solano está sentenciado a 10 años de privación de libertad. El tribunal lo declaró convicto por Atentado, Desacato y Desórdenes Públicos.
El órgano supremo dejó sin lugar la revisión de causa para Solano y Yoel David Ochoa Álvarez, condenado a 8 años de prisión por los mismos delitos.
La sentencia de la apelación describe que Solano y Ochoa Álvarez “formaron parte de un grupo de manifestantes que a viva voz expresaron frases degradantes contra nuestros dirigentes y agentes del orden, manifestación que fue convocada mediante un grupo de WhatsApp por el acusado Yoel David, y a la que se unió el acusado Yasmani, encabezándola ambos, en evidente apoyo a las consignas degradantes de aquellos”.