Organizaciones de la sociedad civil independiente cubana enviaron este martes una carta abierta al sistema de Naciones Unidas, donde demandan un pronunciamiento inmediato sobre el uso de las fuerzas militares por el gobierno de la isla en contra de una parte del pueblo.
La misiva de la Corriente Martiana y el Partido Pro Derechos Humanos de Cuba precisa que el "Estado que use la fuerza militar contra una parte de su pueblo, no debe ser Miembro de Naciones Unidas".
"Desde Cuba y su diáspora denunciamos que en nuestro Estado, su único dirigente por norma constitucional, el Partido Comunista de Cuba, ha desplegado toda su fuerza militar contra una parte del pueblo que, para manifestar su disenso con ese grupo político, tratar de marchar por las calles del país vistiendo ropa blanca y portando una flor o una bandera del mismo color", afirma el texto.
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"Por lo tanto, si el partido comunista es el exclusivo dirigente de la sociedad y del Estado por norma constitucional, la postura agresiva y excluyente del Estado de Cuba con una parte de la sociedad es incompatible con las obligaciones consignadas en la Carta de las Naciones Unidas.
Los firmantes de esta carta abierta lamentan las carencias de procedimientos de Naciones Unidas para expulsar y suspender a Estados Miembros que violen los derechos humanos de sus ciudadanos de forma sistemática, como sucede en Cuba.
Pero afirman que, "a pesar de esta deficiencia procedimental", acuden a los valores éticos y humanitarios de los funcionarios de Naciones Unidas para que, de forma pública, inmediata, directa y precisa, se pronuncien y actúen en favor de la sociedad cubana "atacada militarmente por el partido comunista".
La carta señala que "la agresividad del partido comunista contra la sociedad disconforme ha ido escalando desde que el gobernante Miguel Díaz-Canel dio la orden de combate a través de los medios de prensa nacionales. Él ha convocado reiteradamente a combatir, por cualquier medio, a todo cubano que disienta del partido comunista".
"Un sentimiento amargo se experimenta cuando se observa que un gobierno ─ sea de cualquier orientación ideológica – movilice fuerzas policiales y militares con el propósito de impedir la realización de una manifestación pacífica que reclame reformas en las estructuras del Estado y del gobierno. La opinión pública internacional, los órganos de las Naciones Unidas y sus instituciones para la defensa de los derechos humanos, no pueden permanecer indiferentes ante el uso represivo de la fuerza para acallar la voz popular. Democracia es el derecho de libre opinión, de reclamo civilista, de manifestación y de disenso. La fuerza militar frente a ciudadanos cuyas únicas armas que enarbolan son sus opiniones debe ser internacionalmente condenada", indica la misiva firmada por Moisés L. Rodríguez Valdés e Ileana Ravelo Jerlehagen, de la ONG Corriente Martiana y por Mario J. Viera González, Lázaro M. García Cernuda y Lázaro González Valdés, del Partido Pro Derechos Humanos de Cuba.
En octubre de 2020 Cuba fue elegida para integrar el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas, órgano compuesto por 47 Estados miembros, responsables de la promoción y protección de todos los derechos humanos en el mundo.
Es la quinta ocasión en que Cuba ocupa un escaño en este órgano, entre los 8 reservados al Grupo de Estados de la América Latina y el Caribe.