Las Operaciones Aéreas y Marítimas (AMO) de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los EE. UU. (CBP, por sus siglas en inglés) interceptaron en los últimos días a decenas de inmigrantes ilegales cubanos y alertaron sobre un aumento en los cruces marítimos.
Una primera acción tuvo lugar el 9 de mayo, cuando los agentes de AMO de Miami detectaron una embarcación rústica y transmitieron la información al sector de la Guardia Costera de EEUU en Key West y como resultado fueron interceptados 21 inmigrantes cubanos.
El 11 de mayo, la Unidad Marina de Marathon respondió a los informes de un posible barco cubano en esa zona. En esa ocasión los agentes de la Marina interceptaron la embarcación rústica que transportaba a 16 presuntos inmigrantes cubanos y los transfirieron bajo custodia de la Guardia Costera.
Los guardacostas de EEUU recordaron este viernes en un comunicado que los migrantes interceptados en el mar después del 27 de abril de 2023 están inhabilitados indefinidamente de los procesos legales de libertad condicional para cubanos y haitianos.
La terminación de la orden de salud pública del Título 42 no altera las políticas de migración marítima y las fronteras marítimas permanecen cerradas, dijo esta autoridad.
"Independientemente de la nacionalidad, los migrantes interceptados en el mar por las Operaciones Aéreas y Marítimas de Aduanas y Protección Fronteriza, la Guardia Costera o las fuerzas del orden público estatales serán repatriados a su país de origen, devueltos a su país de partida o reasentados en un tercer país de acuerdo con con políticas y planes que rigen la migración marítima en el Estrecho de la Florida y el Mar Caribe. Cualquier persona que llegue irregularmente por mar a los Estados Unidos, incluidos nuestros territorios, será detenida por la Patrulla Fronteriza y estará sujeta a una expulsión acelerada. Los eventos sospechosos de contrabando de personas serán investigados por Investigaciones de Seguridad Nacional", indica el comunicado.
El oficial Brendan C. McPherson, comandante del Séptimo Distrito de la Guardia Costera, alertó en el comunicado: "No se hagan a la mar. Como he dicho a menudo, la migración marítima irregular siempre es peligrosa y muy a menudo mortal. Los migrantes que son interceptados en el mar serán repatriados inmediatamente de acuerdo con las políticas y los planes que rigen la migración marítima en los Estrechos de Florida y el Mar Caribe".
"Los migrantes que lleguen a nuestras costas en los Estados Unidos estarán sujetos a una expulsión acelerada, y aquellos que no califiquen para la protección serán expulsados rápidamente con al menos una prohibición de cinco años para regresar a los Estados Unidos", dijo el contraalmirante.