Cuba exporta a los médicos como hace medio siglo hizo con el azúcar. La BBC se pregunta a qué se debe que una isla con serios problemas actúe como si se le sobraran los doctores.
Los médicos son uno de los principales productos de exportación de Cuba pero se han vuelto también un canal peculiar y a menudo polémico de cultivar relaciones entre la isla y otros países en el mundo, según un reportaje que publica la página digital BBC Mundo.
La publicación alude al hecho de que la semana pasada Brasil se convirtió en la última de una larga lista de naciones que anuncian planes para importar doctores cubanos (6 mil o más) y cubrir así la falta de asistencia en “regiones particularmente carentes” en su territorio.
BBC apunta que algo parecido ocurrió en países como Venezuela, adonde han ido a parar unos 30 mil trabajadores cubanos de la salud.
Pero el avance del llamado “internacionalismo médico cubano”, dice, plantea una pregunta: “¿a qué se debe que una isla con serios problemas económicos sea una gran fuente de doctores para la región y más allá?”
Tras precisar que la exportación de médicos fue siempre un instrumento de la política exterior cubana desde los años 1960, el reportaje cita a Robert Huish, profesor de Desarrollo Internacional en la Universidad Dalhousie de Nueva Escocia (Canadá), según quien en 2011 había 38 mil trabajadores cubanos del sector en 66 países.
Los médicos de la isla “han cumplido misiones en lugares lejanos como Sudáfrica o Pakistán y, aunque la lista de países adonde van se redujo desde 2010, el número total de esos profesionales en el exterior creció”, dijo.
A juicio del experto, con tales acuerdos bilaterales “Cuba logró beneficios como dinero en efectivo o apoyo en infraestructura de otros países en medio del embargo estadounidense y cultivó lazos aún con naciones con las que tenía poca afinidad política, como Honduras tras el huracán Mitch de 1998”.
Según el reportaje, “Brasil es uno de los países que menos invierte en salud en América Latina, lo que es una paradoja para una nación situada entre la sexta o séptima posición de las mayores economías del mundo".
Carlos Vital, presidente interino del Consejo Federal de Medicina (CFM) de Brasil, informó que el 94 por ciento de los médicos cubanos y bolivianos que pasaron en 2012 por un examen de validación de conocimientos en Brasil no lo aprobadon.
Vital precisó que en el país “hay médicos para atender la demanda en áreas aisladas o remotas, pero faltan ´condiciones mínimas´ de trabajo para realizar ciertos exámenes o trasladar pacientes”. En otras palabras, que los médicos cubanos son enviados adonde nadie más está en condiciones de ir.
“Las quejas de gremiales médicas por la importación de profesionales cubanos –agrega BBC--se han reiterado en países de la región como Bolivia o Venezuela, donde incluso hubo huelgas o acciones legales para detener los planes”.
De acuerdo con el reportaje, “la polémica llegó incluso a países africanos como Ghana, donde el gobierno negó a comienzos de mes que su decisión de importar 300 nuevos médicos de Cuba apuntara a desactivar una huelga médica en el país”.
La publicación alude al hecho de que la semana pasada Brasil se convirtió en la última de una larga lista de naciones que anuncian planes para importar doctores cubanos (6 mil o más) y cubrir así la falta de asistencia en “regiones particularmente carentes” en su territorio.
BBC apunta que algo parecido ocurrió en países como Venezuela, adonde han ido a parar unos 30 mil trabajadores cubanos de la salud.
Pero el avance del llamado “internacionalismo médico cubano”, dice, plantea una pregunta: “¿a qué se debe que una isla con serios problemas económicos sea una gran fuente de doctores para la región y más allá?”
Tras precisar que la exportación de médicos fue siempre un instrumento de la política exterior cubana desde los años 1960, el reportaje cita a Robert Huish, profesor de Desarrollo Internacional en la Universidad Dalhousie de Nueva Escocia (Canadá), según quien en 2011 había 38 mil trabajadores cubanos del sector en 66 países.
Los médicos de la isla “han cumplido misiones en lugares lejanos como Sudáfrica o Pakistán y, aunque la lista de países adonde van se redujo desde 2010, el número total de esos profesionales en el exterior creció”, dijo.
A juicio del experto, con tales acuerdos bilaterales “Cuba logró beneficios como dinero en efectivo o apoyo en infraestructura de otros países en medio del embargo estadounidense y cultivó lazos aún con naciones con las que tenía poca afinidad política, como Honduras tras el huracán Mitch de 1998”.
Según el reportaje, “Brasil es uno de los países que menos invierte en salud en América Latina, lo que es una paradoja para una nación situada entre la sexta o séptima posición de las mayores economías del mundo".
Carlos Vital, presidente interino del Consejo Federal de Medicina (CFM) de Brasil, informó que el 94 por ciento de los médicos cubanos y bolivianos que pasaron en 2012 por un examen de validación de conocimientos en Brasil no lo aprobadon.
Vital precisó que en el país “hay médicos para atender la demanda en áreas aisladas o remotas, pero faltan ´condiciones mínimas´ de trabajo para realizar ciertos exámenes o trasladar pacientes”. En otras palabras, que los médicos cubanos son enviados adonde nadie más está en condiciones de ir.
“Las quejas de gremiales médicas por la importación de profesionales cubanos –agrega BBC--se han reiterado en países de la región como Bolivia o Venezuela, donde incluso hubo huelgas o acciones legales para detener los planes”.
De acuerdo con el reportaje, “la polémica llegó incluso a países africanos como Ghana, donde el gobierno negó a comienzos de mes que su decisión de importar 300 nuevos médicos de Cuba apuntara a desactivar una huelga médica en el país”.