Régimen cubano urge a sus seguidores en el mundo a apoyar con "solidaridad económica", no solo política

El Capitolio, sede del parlamento cubano, se refleja en un charco de agua en medio de un apagón en La Habana, en octubre pasado. (AP/Ramon Espinosa /Archivo)

El gobierno cubano pide a los movimientos de solidaridad que, además de la propaganda política, manifiesten su apoyo con proyectos concretos en sectores claves como el energético, la alimentación y el turismo.

El régimen cubano ha llamado a sus seguidores a nivel internacional a mostrar su solidaridad con aportes concretos en el plano económico, no solo político, en medio de la crisis general que enfrenta la isla en sectores básicos como el energético, la alimentación y la salud pública, entre otros.

En un foro en París, en la sede del Partido Comunista Francés, el presidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), Fernando González, dejó claro que este tema es una prioridad para el gobierno de La Habana, según un reporte de la estatal Prensa Latina.

Durante su intervención en el primer día del evento, que se celebra este fin de semana en la capital francesa, el funcionario cubano también resaltó la importancia de "potenciar las visitas grupales" a la isla, en apoyo al también deprimido sector turístico, que no acaba de repuntar tras el hundimiento que significó la pandemia de Covid-19.

Cuba había recibido solo 1.844.917 turistas internacionales hasta octubre de 2024, para una disminución del 6,5 % en comparación con el mismo período del 2023, según cifras de la Oficina Nacional de Estadística e Información (ONEI). La isla ni siquiera alcanzará la meta revisada de llegar a los 2,7 millones de turistas en 2024, de los 3,2 millones previstos inicialmente.

El moderador de la comisión que aborda la colaboración económica en ese foro, el presidente de Cuba Coopération France (CubaCoop), Víctor Fernández, dijo que el movimiento de solidaridad con Cuba puede ofrecer "soluciones frente al bloqueo" con proyectos concretos en sectores prioritarios como la salud, la alimentación, las energías renovables y el turismo.

Otros representantes de organizaciones europeas que apoyan al régimen cubano llamaron a la realización de proyectos de energías renovables para paliar la crisis energética, como el español Paco Calderón, presidente de Solidaridad para el Desarrollo y la Paz (Sodepaz), quien también atribuyó el problema al "bloqueo estadounidense".

En las últimas semanas, Cuba ha apelado al apoyo de aliados como Rusia, Venezuela y México, con cuyo petróleo intenta paliar una crisis energética que lleva ya tres colapsos totales y se ha visto agravada por el impacto de dos huracanes y dos sismos.

Mientras, opositores cubanos han llamado a las autoridades europeas a exigir al régimen cubano un cambio democrático y el respeto a los derechos humanos. En una comparecencia en la Comisión de Asuntos Exteriores del Senado de España la semana pasada, la activista fundadora de Cuba Decide, Rosa María Payá, abordó la crisis en la isla y pidió a la Unión Europea que traduzca su solidaridad en acciones que apoyen el cambio democrático en Cuba.

La isla vive una de sus peores crisis económicas, con el consecuente impacto social en una población cada vez más empobrecida. La semana pasada, el ministro de Economía Joaquín Alonso Vázquez informó que este año el Producto Interno Bruto (PIB) sufrirá una contracción, y aunque no aventuró una cifra, reconoció que sería acertada la previsión del 0.4 % anunciada previamente por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).

El gobierno cubano ejerce un férreo control sobre las actividades no estatales de producción, impidiendo su desarrollo. Este viernes, autoridades locales dijeron que total de 524 productores de alimentos en la provincia Ciego de Ávila fueron llevados a las llamadas "comisiones agrarias" y a 137 se les retiró el derecho al usufructo de la tierra.

Cuba ocupa el peor lugar de la región de las Américas en el Índice de Libertad Económica que elabora The Heritage Foundation. La organización considera que la economía de la isla se encuentra “reprimida”, según el Índice de 2024.