El pitcher derecho Ediel Ponce, novato del año en la más reciente Serie Nacional de Béisbol, ya comenzó sus entrenamientos en República Dominicana, dijo a Martí Noticias el entrenador Chiqui Mejía, quien lo acogió en su academia en la localidad de Bonao.
Ponce, de 18 años, abandonó la isla el pasado fin de semana con la intención de conseguir un contrato con alguna organización de Grandes Ligas en el próximo período de firmas internacionales, que comenzará el 15 de enero de 2025. La información fue publicada originalmente por el periodista Francys Romero en sus redes sociales.
Mejía, considerado un genio en la preparación de lanzadores y por cuyas manos han pasado varios de los mejores serpentineros dominicanos que han estado en años recientes por las Grandes Ligas, trabajará con el cubano para mejorar su velocidad, el movimiento de sus envíos y su control sobre la zona de strikes.
En su año de debut en el torneo doméstico cubano, el joven serpentinero de Ciego de Avila fue el líder en promedio de carreras limpias, con efectividad de 2.15 en 71 entradas de labor, en las que propinó 43 ponches y tuvo récord de ocho triunfos y dos derrotas. Tuvo 13 aperturas y completó tres de ellas, mientras sus rivales le batearon apenas para promedio de .221.
Después de la Serie Nacional, fue la principal figura de la selección de 18 años que jugó en el torneo clasificatorio para el Mundial de esa categoría, donde consiguió una actuación que llamó la atención de los cazatalentos internacionales. En 14 entradas de labor, ponchó a nueve, permitió cinco hits y limitó a sus rivales a un average colectivo de .111.
Junto a la preparación técnica que recibirá en la academia de Mejía, el jovencito de seis pies de estatura necesita ganar de peso y masa muscular, pues apenas marca 170 libras en la báscula, lo cual redundará en un aumento de varias millas en su velocidad, que ahora anda cercana a las 90 mph en la recta.
Además, lanza sinkers y cambios de velocidad, arsenal al que deberá incorporar nuevos envíos para cimentar su camino hacia las Mayores.
Su salida es un duro golpe para la pelota de la isla, que se prepara para participar en el torneo Premier 12, organizado por la Confederación Mundial de Béisbol y Softbol (WBSC) y proyectado para noviembre, donde Ponce estaba señalado como un serio aspirante para integrar la selección cubana.
Desde que en 1991, el también pitcher René Arocha abandonó el equipo nacional durante una escala en Miami, comenzó un éxodo de peloteros que en un inicio fue a cuentagotas, hasta convertirse en un torrente que ha visto salir a más de mil jugadores, en busca del sueño de jugar en Grandes Ligas.
En un principio, los peloteros aprovechaban viajes al extranjero con la selección para abandonar las concentraciones, pero en los últimos años, muchos han optado por pedir la baja y cortar sus lazos con la Federación Cubana de Béisbol (FCB), para emprender por sí mismos un camino hacia el profesionalismo.
El caso más reciente es el del también serpentinero José Ramón Rodríguez, camagüeyano de 31 años, quien solicitó su liberación del béisbol nacional, según confirmó la propia FCB, para firmar un contrato en la Liga Invernal de Venezuela con los Caribes de Anzoátegui.
Al igual que Ponce, Rodríguez estaba en los planes de la selección cubana para el Premier 12, que celebrará su tercera edición y en el que Cuba nunca ha logrado incluirse entre los cuatro primeros en las dos versiones iniciales.