El reciente suicidio de dos adolescentes en la provincia de Guatánamo en menos de 21 días saltaron las alarmas de la población a pesar del silencio de la prensa oficialista sobre estos casos.
Cuba ocupa el séptimo lugar en los índices de suicidios de América Latina según la Organización Para la Salud (OPS) y ubica a los adolescentes como el grupo más vulnerable.
Cubanos consultados por Martí Noticias coinciden en que la elevada tasa de suicidios está asociada a la crítica situación que se vive en el país, y a la incapacidad de los más vulnerables para buscar soluciones a sus problemas.
La trabajadora social Yordanis Estévez dijo que a su juicio "golpea" mucho la "inferioridad” que experimentan algunos adolescentes, que "se sienten incapaces de buscar una solución a esos sentimientos y apelan a quitarse la vida para evitar los problemas".
Yinet, de 15 años, murió por una sobredosis de pastillas la pasada semana. Gloria, de 16 años, se arrojó del edificio de 12 plantas ubicado en las cercanías de la plaza “Mariana Grajales”, en el reparto Caribe de esta ciudad.
El médico fisiatra Roberto Serrano, residente en Songo La Maya, en Santiago de Cuba, cree que "los adolescentes están a merced de las influencias callejeras y no tienen apoyo en sus familias".
"Cuando el núcleo familiar no está sólido, todo se va de la mano”, lamentó el galeno.
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En esos casos el problema podría ser “el estrés”, dijeron algunos consultados, mientras que el galeno recordó que hay un gran por ciento de personas que “no tienen vivienda, el futuro lo ven incierto y tomas decisiones fatales”.
El suicidio en la isla es “un tema tabú”. La Oficina Nacional de Estadísticas usa el término de “lesiones auto infringidas intencionalmente” y en los medios de prensa no se dan reportes de esos hechos, ni se presentan análisis de las razones por las que la cifras ascienden.
Serrano recordó que en el pasado las personas que intentaban suicidarse eran ingresadas en clínicas psiquiátricas.
Dijo que en su localidad un joven intentó suicidarse y no ha recibido ese tipo de atención, de ahí que se hace imposible determinar si aún las isntituciones estales sigue el tratamiento en todos los casos, o en determinados por cientos.
En su informe, la OPS advierte que la tasa de suicidio en la isla es de 16.3 por cada 100.000 habitantes.
La organización señala entre los métodos más frecuentes empleados para quitarse la vida asfixia, envenenamiento, lanzarse desde un lugar elevado, disparo de arma de fuego, prenderse fuego, ahogamiento, corte o punción y un 1% por otros métodos.
(Redacción Idolidia Darias, con reporte de Ivette Pacheco, TV Martí y archivo Martí Noticias)