La sede del cuerpo de bomberos La Ceiba ahora se conoce como el “barrio cubano” y los balseros que allí viven ayudan en labores mecánicas, en la limpieza y en la cocina
El diario La Prensa de Honduras informa este miércoles de la llegada a ese país centroamericano de más de 100 balseros cubanos en los últimos meses.
Según el rotativo, es habitual escuchar en las calles de La Ceiba, ubicada en la costa caribeña de Honduras, frases típicas de los cubanos como "se desguavinó" y “oye, chico”.
A la sede del cuerpo de bomberos local le llaman “barrio cubano”, pues ha sido la residencia de los balseros de la mayor de las Antillas cuando arriban a suelo hondureño.
Solamente en 2013 la cifra ha superado las 70 personas llegadas desde Cuba. A inicios de año, unos 50 balseros cubanos arribaron a La Ceiba y más recientemente, otros 23 llegaron procedentes de Manzanillo y Bayamo.
La travesía descrita por los balseros comienza en Cuba, pasando por Gran Caimán y después Isla del Cisne, para finalizar en Honduras.
El diario afirma que los cubanos son bienvenidos tanto en el cuerpo de bomberos como entre los vecinos de La Ceiba, que además de alojamiento, les brindan comida.
A cambio, los balseros les pagan con sus destrezas, pues "llegan mecánicos, carpinteros y especialistas en diferentes oficios y no le niegan un favor a nadie”, declaró Henry Stanley, comandante de bomberos, a La Prensa.
Los balseros ayudan a las cocineras de la estación, cooperan con la reparación de vehículos y mantienen aseado el edificio de los bomberos.
En el grupo recién llegado hay mecánicos, administradores de empresas, técnicos en construcción, soldadores y carpinteros. Según declaró a La Prensa una de las recién llegadas, Lisandra Martín Cedeño, de 27 años de edad e instructora de arte, “los problemas económicos y la falta de trabajo nos obligan a buscar otros rumbos para mejorar nuestras vidas”.
Todos los que han arribado en ese grupo dicen que "esperan encontrar empleo en La Ceiba y formalizar su residencia hondureña", informa La Prensa.
Según el rotativo, es habitual escuchar en las calles de La Ceiba, ubicada en la costa caribeña de Honduras, frases típicas de los cubanos como "se desguavinó" y “oye, chico”.
A la sede del cuerpo de bomberos local le llaman “barrio cubano”, pues ha sido la residencia de los balseros de la mayor de las Antillas cuando arriban a suelo hondureño.
Solamente en 2013 la cifra ha superado las 70 personas llegadas desde Cuba. A inicios de año, unos 50 balseros cubanos arribaron a La Ceiba y más recientemente, otros 23 llegaron procedentes de Manzanillo y Bayamo.
La travesía descrita por los balseros comienza en Cuba, pasando por Gran Caimán y después Isla del Cisne, para finalizar en Honduras.
El diario afirma que los cubanos son bienvenidos tanto en el cuerpo de bomberos como entre los vecinos de La Ceiba, que además de alojamiento, les brindan comida.
A cambio, los balseros les pagan con sus destrezas, pues "llegan mecánicos, carpinteros y especialistas en diferentes oficios y no le niegan un favor a nadie”, declaró Henry Stanley, comandante de bomberos, a La Prensa.
Los balseros ayudan a las cocineras de la estación, cooperan con la reparación de vehículos y mantienen aseado el edificio de los bomberos.
En el grupo recién llegado hay mecánicos, administradores de empresas, técnicos en construcción, soldadores y carpinteros. Según declaró a La Prensa una de las recién llegadas, Lisandra Martín Cedeño, de 27 años de edad e instructora de arte, “los problemas económicos y la falta de trabajo nos obligan a buscar otros rumbos para mejorar nuestras vidas”.
Todos los que han arribado en ese grupo dicen que "esperan encontrar empleo en La Ceiba y formalizar su residencia hondureña", informa La Prensa.