Representantes de Estados Unidos y Cuba se sentaron frente a frente por tercera vez el lunes en el marco de las negociaciones para reabrir embajadas y restaurar sus relaciones diplomáticas.
La secretaria de Estado adjunta para asuntos del Hemisferio Occidental, Roberta Jacobson, encabezó por la parte estadounidense la charla a puertas cerradas que del lado cubano presidió la directora general de la Cancillería cubana para asuntos de Estados Unidos, Josefina Vidal.
A diferencia de las dos rondas anteriores, una en La Habana y otra en Washington, no hubo acceso para los periodistas, ni comentarios de las funcionarias a la prensa. El hermetismo fue total.
El martes el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba divulgó una escueta nota a manera de conclusión en la que se limitan a evaluar de profesionales las conversaciones:
Encuentro entre funcionarios de Cuba y Estados Unidos
Declaración del director de Temas Bilaterales de la Dirección General de Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores.
El 16 de marzo, tuvo lugar en La Habana, un encuentro entre delegaciones de Cuba y los Estados Unidos, para intercambiar sobre temas específicos relacionados con el proceso de restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre ambos países.
Al finalizar el encuentro, que se desarrolló en un clima profesional, las dos delegaciones acordaron mantener la comunicación en el futuro como parte de este proceso.
La Habana, 17 de marzo de 2015.
Jeff Rathke, un vocero del Departamento de Estado, dijo que las discusiones fueron positivas y constructivas en una atmósfera constructiva y de respeto mutuo".
Los equipos negociadores trabajan para reabrir las embajadas lo antes posible. Ambas naciones consideran que se trata de un primer paso para el restablecimiento de sus relaciones.
Estados Unidos ha insistido en su interés en que esto se produzca antes de la Cumbre de las Américas, a celebrarse los días 10 y 11 de abril en Panamá.
Las partes tratan ahora de pulir sus diferencias sobre cuestiones técnicas para la apertura de las embajadas, como las cuotas de diplomáticos, la libertad de movimiento de los funcionarios, el tipo de acreditación del resto del personal y las restricciones en la valija diplomática.
"Creo que su atención se centra en arremangarse la camisa y tener conversaciones sobre los temas difíciles", dijo la vocera del Departamento de Estado, Jen Psaki, a periodistas en Washington.