En vísperas del inicio en la capital cubana de las conversaciones entre Estados Unidos y Cuba sobre la reanudación de sus relaciones diplomáticas, uno de los principales cazadores de agentes cubanos en Estados Unidos, el ex oficial de contrainteligencia Chris Simmons, aseguró que el equipo negociador de Cuba está encabezado por dos experimentados "espías de carrera": Josefina Vidal Ferreiro y Gustavo Machín Gómez.
Simmons, quien tuvo un papel destacado en la captura de los agentes de la Red Avispa y los "topos" estadounidenses Ana Belén Montes y Walter Kendall Myers, asegura en el sitio Cuba Confidential que los dos diplomáticos, que figuran como Directora y Subdirector respectivamente de la división América del Norte del Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREX), son antiguos miembros de la Dirección de Inteligencia (DI) de Cuba.
Como un triunfo de Vidal en Estados Unidos el autor considera su apoyo al influyente Council on Foreign Relations (Consejo sobre Relaciones Exteriores), una entidad privada que ha promovido un cambio de política hacia la isla. Asegura que su subdirectora para América Latina, la académica Julia Sweig, agradeció a Vidal y otros cinco oficiales de inteligencia castristas por su colaboración en las investigaciones para su libro Inside the Cuban Revolution: Fidel Castro and the Urban Underground, acerca del papel de los luchadores clandestinos en la revolución cubana.
La actual Directora de Estados Unidos en la Cancillería de Cuba abandonó voluntariamente en mayo del 2003 su cargo de Primera Secretaria en la Sección de Intereses de Cuba en Washington, luego que su entonces esposo, el cónsul Anselmo López Perera, fuera expulsado por "actividades hostiles a la seguridad nacional" como parte de un grupo de 14 agentes de inteligencia con cobertura diplomática asignados a la legación en la capital de Estados Unidos y la misión ante la ONU en Nueva York.
Simmons afirma que ella también era una conocida oficial de la DI, pero Luis Domínguez, investigador cubano, refiere que por entonces sólo era diplomática.
En cuanto al segundo de Vidal, Gustavo Machín Gómez, Simmons recuerda que es hijo de un revolucionario cubano (Gustavo Machín de Hoed, muerto en 1967 en la guerrilla boliviana del Che Guevara durante la emboscada de Vado del Yeso).
Domínguez afirma que Machín hijo estuvo destacado en la Sección de Intereses de Cuba de 1997 al 2002, como Primer Secretario y oficial de la DI. En abril del 2000 habría tomado parte en una golpiza a manifestantes cubanoamericanos que se encontraban frente a la sede diplomática, protestando por el caso de Elián González, según lo ha identificado uno de los agredidos, el abogado cubanoamericano Mauricio Claver-Carone.
Fue expulsado por Estados Unidos en noviembre de 2002, en relación con el caso de Ana Belén Montes. En 2003, fue Director Adjunto de la División de América del Norte del MINREX, y su Director entre 2004 y 2005.
Gustavo Machín da instrucciones al sueco Aaron Modig en su rueda de prensa sobre la muerte de Payá.
En 2006, fue nombrado primer Embajador de Cuba en Pakistán.
Luego, regresó a Cuba y se hizo cargo del Centro de Prensa Internacional del MINREX, que regula las actividades de los reporteros y corresponsales extranjeros en la isla. Fue el funcionario cubano que acompañó al joven político sueco Aaron Modig en una rueda de prensa en la que éste dijo que iba dormido en el auto en el que viajaban los opositores cubanos Oswaldo Payá y Harold Cepero, muertos en julio del 2012.
En las charlas del palacio de las Convenciones está presente también el actual encargado de la Sección de Intereses de Cuba en Washington, José Ramón Cabañas. Según el ex escolta de Fidel Castro Teniente Coronel Juan Reinaldo Sánchez, Cabañas fue captado por la DI desde que estudiaba en el Instituto Superior de Relaciones Internacionales, y cuando llegó a hacerse cargo de la sede en Washington en 2012 tenía grado de Teniente Coronel.
Cabañas, el hombre de La Habana en Washington, en un acto por los 5 espías.
Fue Embajador en Austria hasta el 2005 y también incursionó en la embajada cubana en Ottawa, Canadá.
El experto norteamericano en contrainteligencia afirma que desde la perspectiva de la DI, la División de América del Norte del MINREX es considerada de facto un ala del servicio de espionaje. Agrega que es tan importante que tres de sus ex funcionarios fueron luego nombrados embajadores.
Como principales manejadores de los nexos entre Cuba y Estados Unidos, Vidal y Machín Gómez se ocuparon de las negativas a liberar a Alan Gross, el regreso de los tres espías restantes de la Red Avispa y hasta la inseminación artificial de Adriana Pérez O'Connor (esposa del recién liberado Gerardo Hernández, y miembro ella misma de la red de espionaje).
Concluye diciendo Chris Simmons que, considerando esta cadena de eventos, sería bastante seguro predecir que Vidal será seleccionada por Raúl Castro para dirigir la primera Embajada de Cuba en Estados Unidos en más de 50 años.