Diplomático expresa frustración tras ser víctima de ataque acústico en Cuba

Vista del edificio de la embajada de Estados Unidos en La Habana.

Uno de los funcinarios estadounidenses que sufrió afectaciones de salud tras los misteriosos ataques en La Habana criticó en redes sociales lo que considera "una cadena de medias verdades” sobre lo sucedido, reportó este martes NBC.

Funcionarios de alto rango, y de menores niveles, se cuentan entre los afectados por los "ataques a la salud" sufridos por empleados de la Embajada de Estados Unidos en Cuba, entre ellos diplomáticos, personal de seguridad, de servicios médicos y mantenimiento, de acuerdo a una lista de víctimas obtenida por la cadena de televisión NBC.

Al menos 21 estadounidenses destacados en la Embajada de Estados Unidos en La Habana, entre ellos algunos miembros de sus familias, han sufrido pérdida auditiva, de memoria, y dolores de cabeza, entre otros síntomas, de acuerdo con el Departamento de Estado.

Aunque los afectados no han querido hablar públicamente del tema, al menos uno de ellos ventiló en las redes sociales su frustración sobre la respuesta de Washington a esta situación y las dificultades, según dijo, para recibir tratamiento adecuado, destaca este martes un artículo publicado este martes por NBC en su sitio web.

"Tenemos personas afectadas que todavía no tienen información sobre qué hacer desde el punto de vista médico, y una cadena de medias verdades”, escribió a finales de agosto el diplomático, quien se negó a dar declaraciones a NBC.

“Ni la Administración ni ningún partido político es inocente en esto. Esto me ha enseñado que una vez que se pierde la fe, la confianza, es muy difícil creer de nuevo. Yo no creo ya más¨, añadió, citado por NBC.

John Caulfield, que se desempeñó como jefe de la Oficina de Intereses de Estados Unidos en La Habana de 2010 a 2014, dijo a NBC que conoce a uno de los funcionarios afectados.

"Su esposa notó que él estaba subiendo demasiado el volumen del televisor y la radio, y le indicó que debía ir al médico para chequear sus oídos”, narró Caulfield. “Usted tiene pérdida permanente de audición y necesita prótesis de oído”, le indicó el doctor, agregó.

El gobierno cubano he negado su responsabilidad en los ataques y, en un hecho sin precedentes, invitó a agentes del Buró Federal de Investigaciones (FBI) para que investiguen en la isla, según fuentes cubanas citadas por NBC.

Caulfield dijo que cuando en un principio supo de los incidentes, asumió que se trataba de un intento de espionaje, utilizando una nueva tecnología, que salió mal.

"Ellos tratan de escucharnos de manera obsesiva”, dijo Caulfield. “Las veinticuatro horas del día, en mi casa, en mi auto, en culquier lugar donde puedan seguirnos”, afirmó Caulfield, recordando su experiencia como diplomático en Cuba.

Dos funcionarios del Departamento de Estado dijeron a NBC que es posible que el objetivo fuera hacerle daño a los diplomáticos.

Para complicar las interrogantes sobre por qué los diplomáticos estadounidenses han sido blanco de los ataques, la Embajada de Canadá en La Habana ha reportado que algunos funcionarios de esa sede también han sido afectados.

Un equipo de la Real Policía Montada de Canadá también se encuentra investigando en La Habana, según fuentes cubanas, dijo NBC.

(Con información de NBC News)