La Asamblea de Cineastas Cubanos (ACC) denunció un reciente acto de censura y exclusión de las autoridades culturales contra el artista y abogado Demian Rabilero del Castillo.
Rabilero, director del Museo de la Imagen y el Sonido “Bernabé Muñiz Guibernau”, de Santiago de Cuba, fue separado de su puesto de trabajo por promocionar obras de integrantes de la ACC durante la III Semana de Audiovisuales efectuada del 8 al 13 de abril de 2024.
“Puso en la programación una serie de documentales que pertenecen a realizadores miembros de la Asamblea, organización no reconocida por el Estado cubano, que agrupa a realizadores que viven en la isla y a otros que no viven en ella, pero tienen posiciones contrarias al Gobierno”, anota el acta emitida por las autoridades y divulgada en redes sociales por Rabilero.
El documento oficial reprueba que la curaduría realizada por Rabilero incluya documentales que “no se ajustan a la política cultural” del país, así como el hecho de no haber consultado al Centro Provincial de Patrimonio para ello.
“El hecho se agrava si tenemos en cuenta que esta Asociación (ACC) hace una donación al Museo de libros y el compañero en cuestión realiza un video promocionando la Semana, mostrando el donativo y agradeciendo el mismo a dicha Asociación (ACC)”, añade.
Basados en el Decreto Ley No. 13 del 2020, las autoridades acusan al directivo de “incumplir la Constitución” y las normativas que deben regir su labor, y lo catalogan como “negligente”.
En ese sentido, la organización independiente afirma en su declaración que “Demián es la punta de un iceberg. Miembros de nuestra ACC han sido presionados de diferentes maneras. Mientras eso sucede, el clientelismo gana espacio con la asignación de recursos que hasta hace muy poco no existían, a la vez que se instaura una narrativa triunfalista que sigue eludiendo los verdaderos problemas de fondo del cine cubano referidos justamente a la exclusión, la censura y el abuso institucional ejercidos de una manera cada vez más burda y agresiva”.
Aclara que el donativo al Museo de la Imagen y el Sonido consta de libros sobre cine, afiches de películas cubanas y otros materiales para “apoyar a una institución única en su tipo, de incalculable valor para el cine y la cultura cubana”.
Indica que las películas cuestionadas “son destacados títulos del cine nacional, algunos con un importante recorrido internacional”.
La asociación independiente de cineastas recuerda que muchos integrantes del gremio han tenido que partir al exilio en busca de espacios para un cine desprovisto de la rigidez y la intransigencia de las instituciones culturales estatales.
“Muchos de los jóvenes que hoy se forman en nuestras escuelas de cine y los que intentan hacer sus primeras películas terminarán haciendo lo mismo. ¿Hasta cuándo?, preguntan y reiteran su derecho a oponerse a una política cultural empecinada en no reconocer la complejidad de la realidad cubana ni nuestro derecho a reflejarla desde una perspectiva crítica”.
El director de cine, Armando Capó Ramos, escribió en Facebook: “Miro a las instituciones y me da pena como han expulsado a los buenos. Apartado el talento. Marginado a los justos. Exiliado a los honestos”.
El artista, miembro de la Asamblea de Cineastas que donó ejemplares de sus investigaciones sobre cine y carteles de sus películas a la Semana de Audiovisuales, señaló que “mientras la política cultural siga siendo la censura, el abuso, la falta de derechos, la complicidad, el exilio y el despojo de los derechos no hay descanso”.
De igual modo reaccionó el guantanamero Daniel Ross que, en conversación con nuestra redacción, calificó el acto contra Rabilero como “bochornoso”.
“Mi amigo Demian es una de las personas más capaces que hay ahora mismo en Santiago de Cuba y una persona que siempre está contribuyendo con donaciones y tratando de impulsar a muchos cineastas acá y de otras partes del mundo. Además, hay una declaración de odio contra la Asamblea de Cineastas porque, supuestamente, no está legitimada por el Estado cubano. De verdad que lo siento, es todo aberrante en un país que todavía el Estado está romanceando con todas las donaciones, porque vive de donaciones, ¡totalmente disonante! O sea, dice una cosa y hacen otra, pero bueno, al final el karma es el que hablará y yo pienso que el futuro, al menos de la Asamblea, es que casi todo el mundo se haga cineasta independiente”.
“De verdad, que no entiendo todavía cómo a esta altura, estamos con censura. Yo pienso que a Demian le vendrán cosas mejores”, resaltó.
También el reconocido cineasta Pavel Giroud, asentado en Madrid, comentó a Martí Noticias que lo ocurrido con Rabilero es “otra raya más al tigre”.
“Me parece, obviamente, una barbaridad. Otra raya más al tigre. Casualmente en la película que acabo de terminar hay una escena en la que ocurre algo similar y es una película que hice aquí en España con un equipo técnico español y ellos me preguntaban si ese tipo de cosas ocurrían en Cuba, yo les dije, lo triste no es que haya ocurrido, lo triste es que sigue ocurriendo”.
“Esto que le ha pasado a Demián es una manifestación de eso. Exactamente lo mismo que me pasaba con 'El caso Padilla' que me preguntaban, ¿y eso de verdad ocurrió en Cuba? Yo decía: ‘no ocurrió, ocurre’. Es la esencia del sistema”, indicó.