El Observatorio Cubano de Conflictos (OCC) registró 370 protestas públicas en abril de 2023, mes en el que la escasez de gasolina acentuó la grave crisis en el país.
En abril prevalecieron las expresiones de descontento concernientes a los derechos económicos y sociales que alcanzaron la cifra de 216 mientras que 154 fueron reclamos de derechos civiles y políticos, según el informe del OCC, publicado este lunes.
Las protestas relacionadas con derechos económicos “incluyeron críticas sobre mala gestión del Gobierno, la grave escasez de gasolina, los precios de los alimentos, la inflación y otras afectaciones a la economía popular y el estado crítico de los servicios públicos de salud, vivienda y transporte”, detalló el periodista Rolando Cartaya, de la Fundación para los Derechos Humanos en Cuba.
Los cubanos protestaron en abril por los “cortes eléctricos de siete horas o más, pese a que el gobierno había anunciado que no rebasarían tres horas” y por el hambre que asola a la población, apuntó el reporte del OCC, entidad con sede en Miami.
En este sentido, el Observatorio Cubano de Conflictos trae a colación un informe del Programa Mundial de Alimentos que revalidó que el salario mínimo mensual cubano es insuficiente para cubrir los requerimientos nutricionales de la población (2.300 kilocalorías).
Los pronunciamientos cívicos vinculados con derechos económicos y sociales también versaron sobre la ineficacia y caos de los servicios públicos de salud, vivienda y transporte, la violencia de género, la inseguridad ciudadana y el alza de los robos con violencia, el aumento de los desamparados y el impacto de la situación económica y social en las personas más vulnerables.
El Observatorio destacó que la grave escasez de gasolina se añadió a la "calamitosa vida cotidiana en Cuba", afectando el transporte público y privado, originando enormes colas en las gasolineras y “convirtiendo en desiertos polos normalmente concurridos de las ciudades”.
La insuficiencia de gasolina obligó a las autoridades a suspender clases y actividades laborales y el tradicional desfile del Primero de Mayo.
“En el campo de la salud descollaron las protestas relacionadas con dolencias que requerían atención urgente y que no han sido atendidas porque los especialistas que podrían encargarse fueron contratados por el gobierno a otros países”, precisó Cartaya.
Las 154 manifestaciones en reclamo de derechos civiles y políticos comprendieron “grafitis con consignas antigubernamentales y contra el Partido Comunista de Cuba, críticas a la ineptitud de los altos dirigentes, llamados en las redes sociales a cambiar o introducir cambios al sistema, protestas frente a organismos del gobierno y reacciones contra la represión”.
“Estos retos incluyeron dos revueltas en las prisiones, de manifestantes del 11 de julio de 2021, protestas presenciales en lugares públicos en reclamo de libertades, al menos tres grafitis con consignas antigubernamentales, cacerolazos y posts o videos de cubanos comunes y personalidades de la vida nacional denunciando la miseria en el país y la ineptitud de los gobernantes, y reclamando cambios en el sistema o, del sistema”, apuntó el especialista de la organización.
Los mecanismos represivos utilizados por el régimen como los tratos crueles en las prisiones, la expulsión de centros de educación superior, las autoinculpaciones forzadas, las detenciones arbitrarias y amenazas fueron muy denunciadas tanto en las redes sociales como en protestas presenciales, de acuerdo al informe.
Las expresiones contestatarias compiladas por el OCC en el cuarto mes de este año ocurrieron en 14 de las 15 provincias de la isla y el municipio especial Isla de Pinos. El territorio más activo fue La Habana con 107 protestas, seguida por Holguín con 39 y Matanzas con 17.
El Observatorio Cubano de Conflictos resalta una serie de puntos que, a su consideración, marcarán pautas en el futuro inmediato de Cuba:
“El calentamiento de la caldera social cubana con la adición de la crisis de los combustibles y un probable incremento de la inflación pronosticado por los expertos”; “el estrechamiento de relaciones con Rusia (…) que podría robustecerse en el área militar estratégica y de inteligencia, probablemente en la desviación de sanciones económicas aprovechando los vínculos de Cuba con aliados antiamericanos y bandas criminales y terroristas”.
La organización opina que “la política de toma y daca de la administración Biden en su claro acercamiento a La Habana parece hasta ahora más prudente que las aperturas unilaterales de la administración Obama”, pero alerta que el régimen puede manipularlas a su favor.
Asimismo, el Observatorio subraya que el régimen, tratando de aliviar sus estrecheces económicas, “lanzó un globo exploratorio, al anunciar a través de la Iglesia Católica que tiene voluntad para discutir la liberación de los presos políticos”.
El Observatorio Cubano de Conflictos concluye diciendo ─en consideración a que Cuba "ha sido históricamente una fábrica de presos políticos donde unos salen y entran otros"─ "que Estados Unidos debería perseguir desde su posición actualmente ventajosa una meta más alta que ha sido propuesta por los opositores cubanos: la despenalización verificable del disenso político en la isla”.