Dos figuras del béisbol cubano firmaron contratos en el extranjero para sumarse a los tres peloteros de la isla que ya juegan fuera del país.
El reconocido toletero Alfredo Despaigne llegó el jueves a Japón para integrar el equipo de los Marineros de los Chiba Lotte, en tanto Yunieski Gourriel firmó con Capitales de Quebec, en Canadá.
Despaigne, de 27 años, jugó a comienzo de temporada con los Piratas de Campeche en la Liga Mexicana de Béisbol, que después lo suspendió de forma permanente tras confirmar que fue inscrito con un pasaporte dominicano falso. Con el equipo mexicano, Despaigne bateó para .346 en 20 partidos, con cinco cuadrangulares y 15 carreras remolcadas.
Despaigne posa para los fotografos.
Yunieski Gourriel, de 32 años y hermano mayor de Yulieski, bateó par de hits con una impulsada en cuatro turnos al bate el miércoles en la victoria de Capitales de Québec 10-3 sobre Jackals de Nueva Jersey.
"Pensé mucho en mi familia y en que si tengo éxito aquí eso podría abrirle el camino a muchos cubanos para que puedan jugar legalmente en Canadá", expresó Gourriel, patrullero central del equipo capitalino Industriales.
Otros tres peloteros cubanos juegan en Japón: Frederich Cepeda y Héctor Mendoza, con los Gigantes de Yomiuri, y Yulieski Gourriel con Yokohama DeNa Bay Star.
Las deserciones golpearon fuerte el deporte de la isla en los últimos años, especialmente el béisbol, y varias figuras de la pelota cubana desertaron para firmar contratos millonarios en las Grandes Ligas de Estados Unidos, como José Abreu, Yasiel Puig y Aroldis Chapman.
A pesar de la nueva política del gobierno cubano, que desde el año pasado autorizó que algunos jugadores sean contratados en el exterior, las Grandes Ligas siguen atrayendo a los deportistas de la isla.
En días recientes las autoridades del béisbol cubano sancionaron a más de media docena de peloteros que intentaron salir ilegalmente del país, y confirmaron que Yasmani Tomás, jardinero central de Cuba e Industriales, logró salir y su paradero era desconocido.