Un balsero cubano que llegó con otros 10 a Hollywood Beach este verano fue sentenciado el miércoles a un año y un día en una prisión federal por obstrucción de abordaje.
Lazaro Mora Gutiérrez, un soldador villaclareño de 40 años, enfrentaba originalmente cargos de agresión contra un agente federal después de que las autoridades le acusaran de amenazar con un machete a un miembro del servicio de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP) de Estados Unidos.
Sin embargo, el video presentado durante el juicio no demostró que Mora Gutiérrez usara un arma blanca de manera amenazante.
Durante el juicio realizado en septiembre, después que el jurado, al cabo de varios estudios del video aéreo del incidente, votara 9-3 contra la acusación de que el cubano había lanzado machetazos contra el agente federal, y 11-1 a favor del cargo de obstrucción, los fiscales propusieron a la defensa abandonar el primer cargo, si Mora Gutiérrez se declaraba culpable del segundo, lo cual aceptó.
Un juez ordenó el jueves que la pena de prisión sea seguida por dos años de libertad supervisada y que Mora se entregue a las autoridades de inmigración cuando salga de la cárcel.
Si tiene una buena conducta, podría ser excarcelado dentro de cinco meses.
No está claro si cuando salga en libertad Mora será repatriado a Cuba debido a su actitud, a pesar de haber cumplido con el requisito de tocar tierra estadounidense de la política de pies secos y pies mojados vigente para los cubanos.
Las multas en el caso fueron canceladas debido a la insolvencia del acusado.
Recapitulando los hechos
Un jurado federal desestimó el cargo de agresión a un agente presentado contra Lazaro Mora Gutiérrez.
Según una denuncia radicada en la corte, la Guardia Costera de Estados Unidos descubrió al grupo el 25 de junio a corta distancia de la costa, cerca del muelle de Dania Beach, a bordo de una embarcación rústica de 12 pies propulsada por un motor Honda, e intentó detenerlos.
Las autoridades relataron que los inmigrantes ─ 10 hombres y una mujer procedentes de las provincias de Camagüey y Villa Clara─ estaban armados con cuchillos, machetes y otras armas, y estaban haciendo gestos amenazantes hacia los encargados de hacer cumplir la ley.
La denuncia precisa que un agente de interceptación marítima del CBP ordenó a los balseros apagar el motor y levantar las manos, pero sus órdenes fueron ignoradas. Los agentes sostenían que uno de ellos lanzó un machete hacia la embarcación del CBP, pero nadie resultó herido.
Mientras tanto, Mora Gutiérrez estaba forcejeando con otra persona en el bote mientras trataba de herirse con un cuchillo.
Cuando el agente de interceptación se acercó para determinar quién les había arrojado el machete, Mora Gutiérrez habría lanzado varios tajos al aire. El oficial le ordenó entonces soltara el arma y levantara las manos. Mora Gutiérrez obedeció la primera orden, pero entonces tomó un cuchillo e intentó herirse.
Sólo los cubanos que evitan ser interceptados por la Guardia Costera en el mar y llegan a la costa, pueden quedarse EE.UU. bajo la Ley de Ajuste Cubano, que les permite solicitar la residencia permanente después de un año y un día. La única manera de quedarse en EEUU luego de haber sido interceptados es si están heridos de gravedad y necesitan asistencia médica inmediata.
Múltiples intentos de detener el bote por parte de la Guardia Costera, el CBP y el Servicio de Inmigración fueron infructuosos.
Los inmigrantes finalmente llegaron a la costa, donde fueron esposados por la policía de la ciudad de Hollywood y oficiales de la Patrulla Fronteriza. Mora Gutiérrez, que según los agentes se bajó del bote armado con un cuchillo, fue el único detenido, después de recibir disparos de balas irritantes no letales.