Organizaciones opositoras en la isla convocan a ayuno y oración entre el 13 y el 15 de mayo en homenaje a Pedro Luis Boitel y Orlando Zapata, y también a pronunciarse en las redes sociales contra los crímenes del régimen castro comunista.
Con estas acciones, organizaciones como Cuba Decide, Unión Patriótica de Cuba y el Movimiento Opositor Juventud Despierta exigen la libertad de los presos políticos cubanos y recuerdan a los cubanos que murieron en prisión cuando realizaban huelgas de hambre para exigir la libertad y la democracia en la isla.
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José Daniel Ferrer , líder de la Unión Patriótica de Cuba, UNPACU, dijo a Radio Televisión Martí que debido a la pandemia cada cubano puede realizar el ayuno desde su vivienda y según sus posibilidades. "Todo cuanto hagamos por nuestros presos es poco", precisó Ferrer.
En Santa Clara, al centro de Cuba, Yoel Bravo del Movimiento Opositor Juventud Despierta, señaló que ya comenzaron a publicar en las redes sociales vídeos para promover la jornada.
El activista insistió en la importancia de que todos conozcan la difícil situación en las cárceles en Cuba "donde los presos son privados de derechos elementales en medio del peligro que representa el contagio del COVID-19 y la falta de atención médica".
También señaló que con el ayuno buscan que, además de los opositores, se sumen a los ciudadanos "de a pie" que también en estos días de pandemia han visto el aumento de la represión y los abusos contra la población civil, agregó Bravo.
Lee también Breve crónica de las huelgas de hambre en CubaPedro Luis Boitel, nació un 13 de mayo y Orlando Zapata un día 15.
Boitel murió en 1972 en la prisión Castillo del Príncipe, La Habana. Lo condenaron a 10 años por contrarrevolución por oponerse al secuestro del ideal democrático. En la cárcel sufrió torturas, palizas y abusos y se le prolongó la sentencia.
Murió en el décimo segundo año de su encierro, al día 53 de huelga, sin asistencia médica y maltratado por los guardias mientras agonizaba.
Orlando Zapata, de 42 años, murió el 23/2/2010 al día 82 de su huelga.
Luego de numerosas palizas y torturas, comenzó su huelga exigiendo respeto a su integridad física y ser reconocido como preso político. Por 18 días, se le negó beber agua, lo que condujo a insuficiencia renal.