"Los interrogatorios, los allanamientos, los decomisos, el aislamiento, las detenciones arbitrarias, las regulaciones excesivas y desproporcionadas de la movilidad interna y externa, la tortura (de índole sexual, en el caso de las mujeres) son una parte del amplio abanico de acciones que infunden terror a las y los comunicadores cubanos", advirtió la organización británica Artículo 19.
En su capítulo sobre Cuba, el informe titulado "Bajo Sentencia: la censura en Cuba, Guatemala y Honduras" dice que durante la documentación de agresiones en contra de periodistas en Cuba, observaron que todos los periodistas independientes, por lo menos en una ocasión, han sido víctima de alguna agresión.
En promedio, los periodistas reportaron a la organización 3,3 agresiones sufridas por víctima, lo cual, según opinaron, resalta la intensidad de la violencia. Además, en un período de seis meses, entre octubre de 2019 y abril de 2020, Artículo 19 documentó 93 agresiones en contra de periodistas de 25 medios de comunicación.
El reporte señala que, a pesar de la reforma constitucional en Cuba, existen diversos tipos penales que son utilizados de manera continua para la persecución de periodistas y defensores de derechos humanos y también para proteger los intereses del Estado cubano.
En una conferencia para dar a conocer el reporte, la abogada cubana residente en Estados Unidos, Laritza Diversent, directora de Cubalex, opinó que la reforma constitucional no implicó cambio alguno en este tema.
“No ha habido ningún cambio a pesar de la reforma constitucional, porque el sistema continúa siendo el mismo, donde no hay posibilidad de defender tus derechos, donde no hay tribunales independientes, donde desde el Estado está la política de agresión, donde la impunidad se le garantiza a todos estos agentes del Estado que amenazan, interrogan, detienen a los periodistas a los que les decomisó sus medios. No hay ninguna forma en la cual un ciudadano pueda defenderse”, declaró la abogada.
"En el plano comunitario, la muerte social y el ostracismo son la consecuencia dolorosa que cualquier periodista que opte por ser libre tiene que asumir de manera automática y como forma de vida", dice Artículo 19.
“Tomar la decisión de ejercer la labor periodística en Cuba de forma totalmente independiente a lo que serían los medios de comunicación oficial, implica que tu vida íntima, tu vida familiar sea expuesta, ya tú no tienes vida privada, incluso eres desacreditada. La decisión que tomas de ejercer la labor no sólo te afecta a ti, también afecta a tu familia... Es cuestión de tiempo de que los órganos de Seguridad del Estado ya te contacten, te citen, te detengan arbitrariamente, te interroguen, amenacen”, explicó Diversent.
El informe señala que Cuba, Honduras y Guatemala han estado sujetos a una historia de represión derivada de muy diversas causas que difícilmente se pueden comparar.
Añade que el efecto para la libertad de expresión del autoritarismo en sus distintas modalidades es fatal, no sólo por las pérdidas humanas en países como Guatemala y Honduras cuando se asesina a un periodista o por la autocensura que se provoca tras la detención y vigilancias sistemáticas en Cuba, sino por las afectaciones que genera la falta de información en el ejercicio de derechos de una sociedad.
Sobre Honduras y Guatemala, el reporte menciona que aunque tienen regímenes formalmente democráticos y pluripartidistas, se aplican variados mecanismos de censura en contra de periodistas y medios de comunicación como leyes que inhiben el ejercicio periodístico y el acceso a la información pública; una amplia gama de agresiones, desde asesinatos hasta campañas de desprestigio en redes sociales; un acceso limitado a la tecnología y el uso de la fuerza desproporcionada en manifestaciones públicas y reuniones, entre otras formas de control.
Artículo 19 es una organización independiente que promueve y defiende el avance de los derechos de libertad de expresión y acceso a la información.